Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 477

Aunque la lógica le decía que Jiang Nuannuan podía estar mintiendo, Zifeng quería arriesgarse.

Al pensar en esto, la oscuridad brilló en los ojos de Zifeng.

"No es de extrañar que Xiaobao y Jiang Sese fueran tan unidos cuando estaban juntos. Los lazos de sangre eran realmente fuertes".

En cuanto a Jiang Nuannuan, no se le podía permitir permanecer en el país, y mucho menos acercarse a Jiang Sese.

"Si esta mujer no es de fiar, entonces se acabó todo para mí".

Justo cuando Zifeng estaba pensando en estas cosas, su teléfono sonó.

Zifeng se sobresaltó. Cuando vio que era el nombre de Bai Li el que aparecía en su pantalla, se relajó inmediatamente.

Algo impaciente, contestó la llamada.

"Zifeng, he oído que te has ido al extranjero para perseguir a Jiang Nuannuan. ¿Cómo va todo? ¿Has tenido algún éxito? ¿Necesitas mi ayuda?".

La voz de Bai Li tenía toques de embriaguez. Zifeng frunció el ceño. "Ahora mismo estoy muy ocupada. Si no tienes nada importante que decirme, no me llames. No tengo tiempo libre".

Al darse cuenta de que Zifeng estaba a punto de colgar, Bai Li se apresuró a decir: "¡Espera!".

"Zifeng, tienes que protegerte mientras estás en el extranjero. Una vez que estés de vuelta, te llevaremos a comer".

"De acuerdo. Voy a colgar”.

Al escuchar el tono de ocupado del teléfono, Bai Li se sintió muy abatido.

A un lado, He Shuhan no podía consolarlo. Solo podía beber con él.

Los sentimientos podían realmente herir a una persona. La parte que pagó voluntariamente no tuvo un final feliz.

Esos días, Jin Fengchen no les había dado ninguna tarea, así que tuvieron tiempo libre.

Bai Li se enteró de que Zifeng se había ido al extranjero y quiso ir a buscarla.

He Shuhan fue el primero en destacar para reprenderlo. A Jin Fengchen nunca le gustó que sus subordinados tuvieran relaciones entre sí.

Si se enteraba, no solo sufriría Bai Li, sino que Zifeng también sería castigada.

Todos conocían los métodos de Jin Fengchen, así que no permitiría que su amigo corriera ese riesgo.

Después de colgar, Zifeng entró en el baño.

La bañera estaba llena de agua fría y Zifeng se metió lentamente.

El agua fría le caló hasta los huesos, y Zifeng se estremeció involuntariamente.

Estaba acostumbrada a ducharse con agua fría. Solo así podía mantener la cabeza despejada.

El agua caliente era la principal culpable de que uno se adormeciera. Zifeng no quería permitirse ese tipo de cosas.

Después de sumergirse en el agua durante un rato, Zifeng se levantó.

Ella caminó hasta colocarse frente al espejo y examinó cuidadosamente la figura de la persona en el espejo.

No había ni un gramo de grasa extra en su cuerpo. Tenía una figura casi perfecta.

Cualquiera que la viera perdería el control, ¿verdad?

Pero ella sabía en su corazón que aunque se desnudara y se pusiera delante de Jin Fengchen, él no le dedicaría ni una mirada.

Eso era lamentable.

Zifeng se rio fríamente. Ella buscó algo de ropa para ponerse y salió del baño.

Tras mirar la hora, Zifeng marcó el número de Jin Fengchen.

Todavía era de día en China. Jin Fengchen miró el nombre que aparecía en su pantalla y contestó rápidamente.

"¿La has encontrado?".

Zifeng dudó por un momento, pero controló sus emociones rápidamente.

Ella dijo lentamente: "Joven Amo, lo siento. Las pistas han llegado a un callejón sin salida, y Jiang Nuannuan desapareció de repente. Tengo que suponer que Ji Chen la ha escondido".

Al oír esto, la mano de Jin Fengchen se apretó alrededor de su teléfono y se sintió irritado.

Siempre había confiado en la eficacia de Zifeng. Si ella encontraba un rastro, sería capaz de traerla de vuelta.

Inesperadamente, esta vez había fracasado.

"Vuelve. Enviaré a alguien más. Hay algo que necesita tu atención en casa", dijo Jin Fengchen con frialdad.

Jiang Sese entró a la oficina con un café. Al ver la expresión del hombre, ella supo que algo le preocupaba.

Jiang Sese dejó el café y se puso detrás de Jin Fengchen.

Masajeando suavemente sus hombros, ella le preguntó con voz suave: "¿Qué pasa? ¿Hay algún problema espinoso?".

"Mjm. Zifeng dijo que perdió el objetivo. Jiang Nuannuan no puede ser encontrada en este momento".

Era evidente por su tono de voz que Jin Fengchen estaba profundamente insatisfecho.

Sin embargo, Jiang Sese no tuvo mucha reacción después de oírlo.

"Está bien. Ahora que Jiang Nuannuan no se atreve a ir a casa y Ji Chen ha recibido su merecido, su situación hoy es apropiada”.

Al oír esto, Jin Fengchen la atrajo hacia sus brazos y la abrazó con fuerza.

"Sese, no quiero dejar escapar fácilmente a cualquiera que te haya hecho daño. Les devolveré el dolor que has sufrido multiplicado por cien".

Cuando Jin Fengchen terminó de hablar, Jiang Sese lo miró directamente a los ojos y dijo con seriedad: "Fengchen, no me importa eso. Mi único deseo es que nuestra familia esté junta y en paz. Para mí, esto es suficiente".

Cuando ella terminó de hablar, besó a Jin Fengchen, el cual fue correspondido por él.

Después de un rato, Jiang Sese estaba entumecida por el beso de él y todo su ser cayó sobre Jin Fengchen.

"Fengchen, tengo mucho sueño. Quiero ir a descansar", dijo Jiang Sese con voz coqueta.

Jin Fengchen sonrió y la llevó a la sala de descanso.

Tras arroparla, se dio la vuelta para marcharse.

Cuando llegó la noche, Jiang Sese se despertó lentamente. Casualmente, vio a Jin Fengchen sentado junto a la cama.

Ella abrazó con una sonrisa la cintura de Jin Fengchen.

Al ver que Jiang Sese ya estaba despierta, Jin Fengchen le acarició la cabeza y le dijo cariñosamente: "Es el final de la jornada laboral, mi pequeña perezosa".

Jiang Sese enterró la cabeza bajo las mantas, avergonzada.

Los dos se quedaron un poco más en la empresa antes de volver a la casa de los Jin.