Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 744

Las lágrimas de la niña caían por su rostro mientras lloraba. Al oír las palabras del hombre, la pequeña se detuvo y miró a Jin Fengchen mientras sus dudas desvanecían.

Incluso después de quitarse las lágrimas de sus ojos con un parpadeo, la niña seguía estando muy insegura.

"¿De verdad? ¿Mami se despertará pronto?".

Al ver la incredulidad en los ojos de la niña, Jin Fengchen sacó un pañuelo de papel y le limpió los mocos. Él dijo con dulzura: "Por supuesto. ¿No me crees? ¿Cuándo te ha mentido papi?".

Tiantian reflexionó antes de decidir: "Papi nunca le ha mentido a Tiantian".

Jin Fengchen le sonrió a la niña y le acarició el pelo con suavidad antes de decir en voz baja: "Entonces Tiantian, ¿puedes ir con el Tío Gu a recoger a tu hermano mayor de su clase? Cuando vuelvas, quizá mami se haya despertado".

La niña moqueó y dijo dulcemente: "De acuerdo".

Al verla de acuerdo, Jin Fengchen asintió con alegría.

"Gu Nian, lleva a Tiantian a buscar a Xiaobao".

Antes de que se fueran, la niña seguía mirándolos con tristeza.

Sin embargo, después de que Jin Fengchen la consolara un poco más, finalmente se fue con Gu Nian.

Después de que ambos se marcharan, la sala se quedó en silencio.

Jin Fengchen se sentó frente a la cama, observando a Jiang Sese.

La piel de ella solía ser muy clara. Sin embargo, después de enfermar, bajo la luz del sol, no solo parecía más pálida, sino incluso translúcida.

A causa de la fiebre, incluso las venas eran casi visibles.

Había una toalla en la frente de Jiang Sese, quien tenía el ceño fruncido y sudaba constantemente.

Ella tenía una aguja en el brazo y el líquido transparente fluía lentamente por sus venas verdes.

Jin Fengchen la miraba de vez en cuando. Cada cierto tiempo, el hombre le quitaba la toalla de la cabeza y le cambiaba el agua.

Luego, pacientemente, volvía a colocar la toalla en la cabeza de la mujer.

Él hizo esta acción innumerables veces, pero Jin Fengchen era extremadamente paciente.

El tiempo pasaba lentamente.

Mientras tanto, cuando la niña vio a Xiaobao, por fin pudo compartir sus temores.

La pequeña arrugó la nariz y se lanzó a los brazos de Xiaobao.

Ella le contó todo lo que había pasado ese día.

"Hermano mayor, papi dijo que mami se despertará pronto, pero la última vez la abuela fue como mami. Durmió en el hospital durante mucho, mucho tiempo. ¿Qué hacemos si mami no se despierta…? Tiantian tiene miedo".

Mientras Tiantian hablaba, grandes lágrimas comenzaron a caer al suelo.

Xiaobao también se preocupó mucho al ver a Tiantian llorar.

Sin embargo, como su hermano mayor, no podía entrar en pánico. Solo podía hacer lo posible por consolarla. "Papi ha dicho que ella está bien, así que está bien. Tenemos que creer en papi. No tengas miedo, ahora te llevaré al hospital a ver a mami".

Después de decir eso, el niño miró a Gu Nian. "Tío Gu, vamos al hospital ahora".

Gu Nian gruñó en respuesta y los tres se dirigieron a toda velocidad al hospital.

Al entrar en la sala, la niña y Xiaobao corrieron a la cama y se quedaron a un lado de Jiang Sese para vigilarla con atención. Xiaobao frunció el ceño y le preguntó a Jin Fengchen: "Papi, ¿qué le pasa a mami?".

"Todavía no se ha despertado, pero no te preocupes".

Sin embargo, Jin Fengchen no pudo evitar fruncir el ceño cuando miró la cara de Jiang Sese.

Tocó la frente de Jiang Sese y descubrió que la temperatura no había bajado. Más bien, había subido.

Él sintió de inmediato que algo no estaba bien.

Él miró a la doctora con el ceño fruncido mientras se concentraba intuitivamente en el punto principal, y preguntó con un tono serio: "¿Qué patógeno? ¿Cómo llegó a su sistema?".

"Según nuestros hallazgos iniciales, este patógeno es de un tipo muy dañino para el cuerpo humano y ataca el sistema inmunológico. Sin embargo, no puede reproducirse de forma natural en el cuerpo humano. Por lo tanto, es muy probable que alguien se lo haya inyectado".

El rostro de Jin Fengchen se ensombreció al escuchar esto.

‘¿Patógeno? ¿Alguien se lo inyectó?’.

Estas palabras se le atascaron en la garganta y sintió que el pecho se le apretaba.

Un profundo temor nubló su mente.

Sintió un escalofrío en la columna vertebral.

"¿Alguien se lo inyectó? ¿Hay un error en el examen? Sese no habría dejado que cualquiera se acercara a ella".

Si realmente fuera porque alguien la inyectó con eso, Jiang Sese se habría dado cuenta.

"Es solo una suposición, pero hay una base médica para esto. El patógeno no puede aparecer normalmente en el cuerpo humano y solo sería una amenaza para los sistemas corporales si alguien toma medidas especiales para introducirlo. Por ejemplo, como...".

Jin Fengchen ya no asimilaba las palabras de la doctora.

Su mente se había quedado en blanco. Le zumbaban los oídos.

Un momento después, su sangre pareció congelarse en sus venas y sintió un miedo atroz.

"¿Señor? ¿Sigue escuchando?".

Al ver el estado de aturdimiento de Jin Fengchen, la doctora no pudo evitar levantar la voz.

Jin Fengchen contuvo la mirada y la punta de sus dedos palidecieron. Su nuez de Adán temblaba mientras preguntaba a la doctora con esfuerzo: "Entonces, ¿qué ha causado este patógeno? ¿Ha habido algún caso de este tipo en el país? ¿Su hospital sabe cómo extraerlo de ella y, además, aparte de atacar su sistema inmunológico, hay otros peligros?".

Por pura preocupación, disparó un aluvión de preguntas.