Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 757

Después de mirar la placa durante un largo rato, Jin Fengchen frunció ligeramente el ceño, como si pensara en varias posibilidades.

Zi Feng... Bo Gelian... Catalina...

Tenía que haber alguna conexión entre ellos.

Reprimiendo estos pensamientos, Jin Fengchen miró las heridas de Gu Nian que no habían sido tratadas. Se habían formado costras en el exterior.

Llamó a Mo Xie.

Diez minutos después, Mo Xie llegó a la casa de la familia Jin.

Al ver a Gu Nian plagado de cicatrices, Mo Xie no pudo evitar reírse.

Luego sacó su botiquín y empezó a limpiar las heridas.

"Ay. Ay. ¿Podrías ser amable? ¿Crees que soy un cerdo recién salido del matadero?".

Gu Nian levantó ligeramente la cabeza. Aunque casi perdió la vida, su rostro parecía inmaculado.

Solo hizo una mueca. Parecía que iba a volcar una mesa.

Mo Xie encontró la expresión del hombre divertida. Desechó el algodón empapado en yodo, luego levantó un frasco de medicina en polvo y un frasco de pomada, y dijo: "Entonces, ¿cuál de estos le gustaría, Señor Cerdo?".

"Aleja tus asquerosas patas de mí. Lo haré yo mismo".

Gu Nian puso los ojos en blanco con enfado y agarró el frasco de pomada.

No era un tonto. La piel absorbía mejor la pomada que el polvo.

Además, estaba claro que Mo Xie no tenía buenas intenciones respecto al polvo blanco. Le haría parecer un fantasma si se lo aplicaba.

Abrió el frasco, vertió un poco de la pomada viscosa de color marrón y se la aplicó ligeramente en la cara. En un instante, volvió a hacer una mueca de dolor.

La mayoría de las cosas que Mo Xie producía eran bastante agresivas, pero definitivamente eran efectivas.

Al verlo en un estado tan lamentable, Mo Xie no pudo evitar burlarse: "Mírate, tan delicado y lamentable".

La expresión de Gu Nian se volvió inmediatamente sombría mientras lanzaba el frasco de pomada y exclamaba con maldad: "¡Piérdete!".

Esquivando el frasco de medicina, Mo Xie se rio. "¿Cómo podría tratar tus heridas si lo hiciera? Pórtate bien y se acabará pronto".

Gu Nian quería echarlo a él y a su cara despreciable. Sin embargo, no tenía otra opción que dejarle tratar sus heridas.

No queriendo presenciar su drama y sus discusiones, Jin Fengchen llamó a He Shuhan.

"Investiga si Bo Gelian ha hecho algún movimiento recientemente. Además, consígueme información sobre la Organización de las Puertas del Hades. Cuanta más información, mejor, incluyendo la conexión entre Bo Gelian y la Organización de las Puertas del Hades. Tengan cuidado".

He Shuhan gruñó concisamente a su instrucción. Jin Fengchen colgó entonces.

Durante la llamada, los dos tesoros vivientes de Jin Fengchen fueron sensatos y permanecieron en silencio.

Sin embargo, la rivalidad secreta no cesó.

Jin Fengchen miró a los dos y descubrió que en sus rostros se veían venas.

No necesitaba adivinar lo que estaban tramando.

Después de que Mo Xie tratara las heridas de Gu Nian, Jin Fengchen ordenó: "Recuerda desinfectar las heridas. Vuelve y prepara un informe para mí. Vigila de cerca los asuntos de la compañía; sospecho que aún puede haber espías. No dejes que se aprovechen del caos".

Gu Nian dejó de sonreír inmediatamente y respondió de forma respetuosa: "Sí, Joven Amo".

Jin Fengchen miró entonces con inquietud a Mo Xie. "Presta mucha atención al estado de Sese en todo momento. Avísame enseguida si descubres algo".

Al ver que Fu Jingyun llamaba, la Señora Fu preguntó con ansiedad: "¿Jingyun? ¿Pasa algo?".

Fu Jingyun dijo claramente: "Madre, ¿está bien Sese? ¿Hay algún problema?".

La repentina pregunta desconcertó a la Señora Fu, pero ella aun así respondió: "Sese está muy bien. Me parece que su complexión se ha recuperado notablemente, así que creo que está bien".

Al escuchar la respuesta de la Señora Fu, Fu Jingyun no pudo evitar soltar un largo suspiro de alivio.

"Eso es bueno".

Al ver que su hijo seguía un poco desganado, la Señora Fu no pudo evitar aconsejarle: "¿Todavía tienes que hacer horas extras hoy? Si no hay mucho que hacer, ven a cenar a casa. Acaban de reunirse como pareja y no deben dejar que el trabajo obstaculice su relación. He gastado mucho esfuerzo para traer a Sese de vuelta a ti, así que no me decepciones. Si no, no podré ayudarte más".

Al darse cuenta de que la Señora Fu probablemente seguiría dando la lata, Fu Jingyun la interrumpió y dijo: "Lo sé, madre. Tengo una reunión, voy a colgar ahora".

Después de colgar el teléfono, la expresión de Fu Jingyun se volvió sombría.

No esperaba que Jin Fengchen fuera tan capaz como para descubrir el rastro de Catalina tan rápidamente.

No era de extrañar que todo el mundo tuviera miedo de su habilidad; él era, en efecto, un oponente digno.

Sin embargo, aunque fuera un dios, Fu Jingyun no admitiría la derrota.

Desde que empezó a dirigir la empresa, disfrutaba de la sensación de tener lo que cosechaba en sus propias manos.

Aunque las cosas obtenidas por la fuerza no dieran un buen resultado, al menos era dueño de ellas.

Tras guardar los documentos de su escritorio, Fu Jingyun se dirigió a la sala de conferencias.

La atmósfera de la reunión en el Grupo Fu ese día era extremadamente solemne. Quienquiera que presentara su informe a Fu Jingyun recibía una reprimenda de su parte.

Durante un rato, la sala de conferencias estuvo en absoluto silencio.