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Chave de pesquisa: Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma Capítulo 759 Los días buenos han llegado
Jiang Sese nunca había sentido algo así, ni siquiera con la madre de Fu Jingyun.
Ella se sintió protegida y sintió que tenía a alguien de quien depender.
Tiantian, quien estaba en los brazos de Jin Fengchen, sentía un poco de curiosidad por saber quién era exactamente esa anciana de aspecto amable.
Se acercó a las orejas de Jin Fengchen y preguntó en tono suave: "Papi, ¿quién es esa abuela?".
Jin Fengchen contestó con un tono suave después de escuchar la pregunta: "Esa es tu abuela. Eso significa que es la madre de tu mami. La salud de la abuela no está muy bien. ¿Quieres hablar con la abuela, Tiantian?".
Tiantian era obediente, así que saltó inmediatamente de los brazos de Jin Fengchen.
La pequeña se acercó a Fang Xueman y habló con un tono infantil: "¿Eres mi abuela?".
Fang Xueman se limpió las lágrimas de la comisura de los ojos al oír la voz. Bajó la cabeza para mirar a Tiantian.
Se fijó en aquella niña regordeta y pequeña que tenía delante. Su corazón se derritió de inmediato y se acercó a ella con cariño. "Oh, tú debes ser Tiantian. Soy tu abuela".
Fang Xueman oyó a Jin Fengchen mencionarle en el camino que Tiantian era la niña que Jiang Sese tuvo después de ir a Francia.
Tiantian le tendió la mano a Fang Xueman, notando su mano extendida.
Después, se quedó obedientemente en los brazos de Fang Xueman.
La pequeña estaba encantada desde el fondo de su corazón después de sentir lo cálida que era Fang Xueman.
Casualmente, Xiaobao regresó de la escuela en ese momento. Cuando se dio cuenta de que Fang Xueman estaba en la habitación, tiró inmediatamente su bolsa a un lado y se apresuró a acercarse.
Saltó junto a Fang Xueman y dijo en tono de sorpresa: "¡Abuela!".
Fang Xueman le dio una palmadita en la cabeza y le respondió con plenitud: "Oh, cómo has crecido, Xiaobao".
Después de escuchar eso, Xiaobao se levantó inmediatamente y dijo: "Por supuesto, tengo que proteger a mi mami y a mi hermana".
Jin Fengchen salió de la habitación al verlos interactuar tan cariñosamente.
Jiang Sese se quedó en la casa de la familia Jin esa noche. Fang Xueman le contó muchas cosas que habían ocurrido en el pasado.
Tanto Xiaobao como Tiantian permanecieron a su lado mientras escuchaban hablar a Fang Xueman.
Aunque Jiang Sese no era capaz de recordar todo lo que Fang Xueman decía, de alguna manera pudo dejar de preocuparse.
Incluso si se trataba de un regaño, Jiang Sese seguía estando dispuesta a escuchar.
En los días siguientes, Jiang Sese permaneció al lado de Fang Xueman.
Cuando salía el sol, ayudaba a Fang Xueman a salir de su habitación para tomar el sol.
Tiantian también acompañaba obedientemente a su abuela. Pronto, el trío se fue volviendo poco a poco más cercano con el paso de los días. Jiang Sese no podía evitar dejarse llevar por esos sentimientos.
En ese mismo momento, He Shuhan recibió una noticia.
Ese día llamó a Jin Fengchen para informarle de algo.
"Jefe, hemos conseguido localizar a Bo Gelian. Ha estado residiendo en Italia recientemente".
Jin Fengchen acababa de terminar una reunión. Sostenía su teléfono con una mano mientras la otra estaba metida en el bolsillo de sus vaqueros. Él estaba de pie junto a la ventana de su despacho, hablando en tono frío: "Continúa".
He Shuhan continuó: "Bo Gelian no está siendo precisamente un ciudadano ejemplar en Italia. Después de escapar a Italia, se involucró íntimamente con algunos lugareños desconocidos. Si no fuera por el revuelo que causó, no habría sido capaz de localizarlo".
Bo Gelian quizás era demasiado insensato o arrogante, pues fue incapaz de pasar desapercibido y había causado problemas incluso después de llegar a Italia. Por el contrario, provocó un gran problema.
Jin Fengchen tenía una expresión fría en su rostro perfecto. Un resplandor amenazante brillaba bajo sus ojos.
Él ordenó: "Observen de cerca sus movimientos. Si se escapa esta vez, la culpa será tuya".
"Sí".
El corazón de Shuhan tembló mientras respondía con confianza. Sin embargo, todavía se sentía ligeramente dubitativo mientras preguntaba: "Jefe...".
Al oír que He Shuhan aún tenía cosas que decir, Jin Fengyao preguntó: "¿Hay algo más?".
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