Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 802

Un momento después, sonó el teléfono de Catalina.

Al ver el número de teléfono que aparecía, Catalina contestó al instante y con respeto.

"Jefe, he reenviado los informes de investigación a su bandeja de entrada".

Al otro lado, Bo Gelian bostezó con sueño y dijo: "Sí, lo he recibido. ¿Hay algún problema con los antecedentes de Fu Jingyun?".

Al oírlo, Catalina respondió con sinceridad: "No, es igual que nuestras anteriores investigaciones. Nació en el seno de una familia rica y siempre se ha dedicado a la investigación médica. Ahora quiere unirse y cooperar con nosotros".

Bo Gelian recibió la respuesta adecuada y abrió tranquilamente su bandeja de entrada: "Déjame ver sus informes... Mm, no es un mal análisis".

Muy pronto, la voz agradablemente sorprendida de Bo Gelian llegó desde el otro extremo de la línea. "¡Realmente ha conseguido estudiar nuestro nuevo patógeno con bastante acierto! ¡Realmente es un prodigio de la medicina! Sus investigaciones son muy buenas. Deberíamos permitirle unirse a nuestro centro de investigación para una prueba. Según su informe, esta Jiang Sese es una persona importante. ¡Su biología es muy adecuada para que el patógeno crezca! Si podemos traerla con éxito, Catalina, serías la mayor contribuyente al centro de investigación".

Al oír esto, Catalina guardó silencio por un momento antes de decir: "Me temo que eso puede ser difícil. Debes saber que Jin Fengchen está siempre al lado de Jiang Sese como su ángel guardián. Jin Fengchen la protege mucho; la única prueba que necesitamos es la de nuestros fracasos pasados".

Bo Gelian se rio entre dientes. Esto le parecía divertido. "Interesante. Empecemos a trabajar primero con esta mujer. Catalina, ¿tienes alguna idea?".

"Solo podemos enviar más gente para secuestrar a Jiang Sese. La fuerza de él es inconmensurable. He cruzado espadas con sus subordinados antes y no puedo ganar. Tendrás que enviar a alguien tú mismo...".

Catalina habló con duda. Ella tal vez podría convencer a Fu Jingyun y hacer que se le ocurriera algo.

Sin embargo, su vida estaba actualmente en manos de Fu Jingyun. Ella no se atrevió a revelarle todo a Bo Gelian.

"Bien, cuando llegue el momento, enviaré a otra persona".

La voz de Bo Gelian sonó melancólica, pero no tardó en volver a la normalidad. "Lo dejaremos así por ahora. Informa inmediatamente si tienes algún problema".

"Claro, jefe".

Tras la respuesta de Catalina, ambos colgaron.

Al día siguiente, Catalina invitó a Fu Jingyun a salir.

Ella se había disfrazado con otra cara, pero Fu Jingyun estaba acostumbrado a sus cambios.

Después de esperar a que Fu Jingyun tomara asiento, Catalina fue directo al grano: "El jefe está de acuerdo".

"¿Oh? Eso fue rápido". Fu Jingyun no pudo evitar tener sus dudas.

Catalina dio un sorbo a su café. "Sí, sin embargo, ¿estás pensando en traer a Jiang Sese?".

"No".

Fu Jingyun no dudó en absoluto. Llevar a Sese era un gran riesgo.

Catalina trató de convencerle: "¿De verdad estás pensando en no traer a Jiang Sese? ¿Puedes dejarla ir?".

Aunque ya se lo había dicho a Bo Gelian, ella no tenía forma de atrapar a Jiang Sese.

Sin embargo, si pudiera llevarse a Jiang Sese, duplicaría su seguro.

Su vida estaba en manos de Fu Jingyun. Si Fu Jingyun llevaba a Jiang Sese a su centro de investigación en Italia, entonces ella tendría cierta ventaja.

Cuando llegara el momento, podría usar la vida de Jiang Sese para amenazar a Fu Jingyun por el antídoto. ¿Y si... le entregaba personalmente a Jiang Sese a Bo Gelian y la utilizaba para obtener ventaja?

Fu Jingyun se giró entonces para lanzarle una mirada fría. "¿Y si no? ¿La enviaré a su muerte?".

Catalina se rio y le mostró una expresión honesta. "No tengo otras intenciones. Mi vida está en tus manos, así que es normal que deba tenerte en cuenta. Entiendo tus preocupaciones, no te preocupes. Cuando traigas a Jiang Sese, no dejaré que el jefe lo sepa. Además, tú conoces mejor que yo la situación del patógeno de Jiang Sese. Está llena de incertidumbre. Si la dejas aquí, podría actuar cualquier día y no podrás combatirlo a tiempo. Entonces, ¿qué vas a hacer? Por lo tanto, te sugiero que la traigas. Cuando llegue el momento y obtengas el antídoto, podrás salvarla en el primer momento".

Las palabras de la mujer golpearon con facilidad las preocupaciones más profundas de Fu Jingyun.

Fu Jingyun reprimió las emociones y la miró detenidamente. "Mm, ¿desde cuándo eres tan amable? ¿Tienes algún motivo oculto? Deberías saber que todo lo que tiene que ver con Sese es más importante que cualquier otra cosa. ¿Crees que correría ese riesgo?".

Él no era tonto. En ese momento, no podía confiar en Catalina tan fácilmente... todavía no.

En lugar de poner en riesgo a Jiang Sese, podría dejarla con Jin Fengchen para que la protegiera y la mantuviera a salvo.

Después de ese intercambio, los dos guardaron silencio.

Después de un rato, Catalina se negó a darse por vencida y dijo despreocupadamente: "Ya que te has decidido, no tengo nada más que decir. Sin embargo, no me culpes por no haber dicho algo antes si ocurriera algo o si ella no pudiera aguantar y muriera".

Cuando escuchó esto, la cara de Fu Jingyun cambió instantáneamente.

...

Fu Jingyun se sintió disgustado al ver que Jiang Sese lo ignoraba.

Él era el que la había salvado, pero ese hecho ya era inútil.

Al final, la persona que él amaba estaba con otra persona.

Viendo la incomodidad entre ambos, la Señora Fu dijo: "Sese, escucha. Todos los platos de hoy los ha hecho Jingyun. Cuando supo que ibas a volver, puso todo su corazón en ello. ¿Por qué no ver si está bueno?".

La Señora Fu añadió más verduras en el plato de Jiang Sese.

Por muy deliciosa que pareciera la comida, Jiang Sese se sentía completamente impotente.

Tal vez no se había recuperado del todo. Ella miró a Fu Jingyun con algo de arrepentimiento. No debería haber aceptado la invitación.

Diez minutos más tarde, Jiang Sese había terminado con esta trampa de almuerzo.

Cuando se levantó, se sintió inesperadamente mareada. La Señora Fu se apresuró a sostenerla.

"Sese, ¿estás cansada? Tu habitación de arriba está igual que la dejaste. ¿Por qué no subes a descansar?".

"Estoy bien...".

La negativa acababa de salir de sus labios cuando Jiang Sese sintió que su visión nadaba con luces.

Finalmente no pudo aguantar más y se desmayó en su silla.

La Señora Fu estaba sorprendida. Ella se volteó para preguntarle a Fu Jingyun con nerviosismo: "Jingyun, ¿qué le ha pasado a Sese?".

Fu Jingyun sabía que esto iba a ocurrir. Cargó a Jiang Sese con una expresión neutral.

"Ella está bien. Se encontraba mal hace un par de días. Tal vez no se ha recuperado todavía".

Tras decir eso, él llevó a Jiang Sese al segundo piso.