Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 887

Jin Fengchen no pensaba engañarlo. Dijo con sinceridad: “Alguien inyectó un patógeno en el cuerpo de Sese. El acónito chino de la región occidental es uno de los componentes del patógeno. Casualmente, en esta cooperación con Fang Cheng, la petición de la otra parte es un suministro a largo plazo de esta hierba, así que...”.

Jin Fengchen no terminó su frase, pero Fang Yuchen ya podía adivinar lo que quería decir. Se quedó atónito.

Nunca había pensado que esa fuera la razón de la cooperación de Jin Fengchen con Fang Cheng.

Cuando Fang Yuchen volvió a sus cabales, preguntó preocupado: “¿Cómo está Sese ahora? ¿Podemos deshacernos de este patógeno?”.

“Ella está bien. Está bajo control por ahora, pero mientras el patógeno esté en ella, no hay forma de que nos relajemos”.

Cuando Fang Yuchen escuchó esto, también se preocupó mucho. Sin embargo, no había nada que pudiera hacer para ayudar.

Solo podía darle a Jin Fengchen unas palabras de consuelo. Finalmente, dijo con sinceridad: “Si me necesitas en el futuro, solo dime qué hacer. No me negaré”.

“Mjm, gracias”, dijo Jin Fengchen en agradecimiento.

“Si no hay nada más, me despido”.

Jin Fengchen asintió en respuesta.

Después de que Fang Yuchen se fuera, Jin Fengchen miró la hora. Imaginó que Jiang Sese y los niños aún no se habían dormido, así que sacó su portátil e hizo una videollamada.

La llamada se conectó muy pronto. Tiantian daba saltos delante de la pantalla, exclamando felizmente: “¡Papi!”.

Al ver a su princesita, todo el ser de Jin Fengchen se calentó.

“Tiantian, ¿Le hiciste caso a Mami hoy?”.

“Papi, me porté muy bien. ¡Me comí todo el arroz que me dió Mami para cenar esta noche! mi Hermano Mayor puede decir que es verdad”.

Mientras Tiantian hablaba, tiró de Xiaobao.

Xiaobao acarició la cabeza de Tiantian cariñosamente y confirmó su historia. “Sí, Papi, puedo comprobarlo. Tiantian se ha portado muy bien hoy, aparte de volcar el tocador de Mami”.

Tan pronto como habló, Xiaobao salió corriendo, cacareando.

Tiantian lo persiguió, regañando: “¡Hermano Mayor malo! ¡Acordamos que no se lo diríamos a Papi y a Mami!”.

Jin Fengchen no pudo evitar reírse. En ese momento, Jiang Sese se acercó desde un lado y se sentó frente al ordenador, preguntando con una sonrisa: “¿Qué te tiene de tan buen humor?”.

Jin Fengchen miró a Jiang Sese con cariño y preguntó en respuesta: “¿Me extrañas?”.

Los dos niños estaban jugando no muy lejos y la repentina pregunta de Jin Fengchen la hizo sentirse un poco tímida. “Te fuiste ayer...”.

Al oír eso, Jin Fengchen le lanzó una mirada de decepción fingida. “Parece que mi Sese no me echa de menos”.

El corazón de Jiang Sese se ablandó al ver su expresión y se apresuró a explicar: “Yo... por supuesto que te extraño...”.

Acababa de decir la mitad de su frase cuando Xiaobao arrastró a Tiantian con él y dijo con picardía: “Mami es tímida. ¿Por qué tienes que preguntar, Papi?”.

“¡Tímida, tímida!”. Tiantian se sumó.

Jiang Sese no pensó que los dos niños estuvieran escuchando su conversación mientras jugaban. Su rostro se sonrojó al instante.

Jin Fengchen pudo ver que su mujer se sentía avergonzada. Les dijo a los dos niños: “No intimiden a su Mami, ustedes dos. Si no, les daré una lección cuando vuelva”.

Tiantian hizo un puchero. “¡No intimidamos a Mami!”.

“¡Así es!”. Xiaobao estuvo de acuerdo, antes de tomar la mano de Tiantian y salir corriendo a jugar.