Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 98

La sorpresa parpadeó en los ojos de Jin Fengyao cuando escuchó la orden de su hermano de investigar las imágenes de CCTV. "Hermano, ¿estás dudando de las palabras de Su Xinrui?".

Al ver que su hermano se había ido después de tratar con Li Mu, pensó que iba a dejar ir a Su Xinrui.

Jin Fengchen se burló. "Es obvio cuando alguien está mintiendo".

¿Cómo podía creer que Su Xinrui no tenía algo que ver con esto basándose en su conjetura unilateral? No dejaría escapar a nadie que quisiera lastimar a Jiang Sese.

"Lo tengo. Iré ahora mismo”. Jin Fengyao asintió con la cabeza a su hermano y luego se despidió.

Después de que se fue, Jin Fengchen regresó a la habitación de Jiang Sese.

Jiang Sese acababa de salir de su baño. Cuando vio a Jin Fengchen, le agradeció una vez más.

"No tienes que agradecerme. Yo soy el que debería disculparse por permitir que algo así te suceda", respondió Jin Fengchen.

Fue por culpa de su negligencia que la familia Lan pudo subir a bordo y Jiang Sese cayó al mar.

"¿Cómo pudo ser tu culpa?".

Si no fuera por él, sólo Dios sabe adónde la habrían llevado las olas. ¿Cómo podría seguir estando aquí sana y salva?

Jin Fengchen suspiró. "No lo pienses demasiado. Se hace tarde. Descansa un poco".

"Mhm”.

Jiang Sese asintió. Después de despedirse de Jin Fengchen, se acostó en la cama junto a un Xiaobao profundamente dormido. Su mirada se volvió suave y gentil. Ella lo tomó en sus brazos y también se fue a la tierra de los sueños.

...

Jiang Sese quedó atrapada en un sueño inquieto a la medianoche. En su sueño, estaba acostada en una cama blanca impecable. Le dolía el abdomen. Su hijo nació... y se lo quitaron.

Los acontecimientos de hace cinco años pasaron de un lado a otro por su mente. Todo su cuerpo se había enfriado. Ella estaba empezando a quedarse sin aliento.

"No, no te lo lleves...".

Su niño. Era su hijo.

"No...".

El ruido despertó a Xiaobao de su sueño. Se frotó los ojos y se levantó de la cama aturdido. Gritó: "Tía Sese".

Ninguna respuesta.

Sintiendo que algo andaba mal, extendió su manita para tocar el rostro de Jiang Sese. La alta temperatura que salía de su piel le provocó pánico.

El niño corrió inmediatamente a la habitación de su padre.

No había pasado mucho tiempo desde que Jin Fengchen se había quedado dormido. Abrió la puerta para encontrar a Xiaobao parado afuera. Su hijo estaba en pijama y sin zapatos, luciendo preocupado. Parecía que acababa de apresurarse.

"¿Qué pasa?". Preguntó Jin Fengchen, frunciendo el ceño.

"¡La tía Sese tiene fiebre! ¡Está tan caliente al tacto!". Xiaobao respondió con ansiedad.

La expresión de Jin Fengchen cayó de inmediato. Cogió a Xiaobao en brazos y fue directamente a la habitación de al lado.

Efectivamente, descubrió que Jiang Sese tenía fiebre. Para empeorar las cosas, todavía estaba atrapada en una pesadilla en la que seguía murmurando en sueños.

"Papá, ¿qué debemos hacer? ¡Parece que la tía Sese la está pasando mal!". A Xiaobao le dolía el corazón cuando miró el rostro de Jiang Sese.

Jin Fengchen inmediatamente llamó a Shen Mubai. La llamada tardó bastante en llegar. La voz de Shen Mubai llegó desde el otro extremo de la línea. "Oye, Joven Amo. Es muy tarde en la noche. ¿Qué es lo que no puede esperar hasta mañana?".

"Jiang Sese tiene fiebre. Ven inmediatamente a ver cómo está".

Sus palabras hicieron que Shen Mubai se enojara tanto que casi le explota una vena. "Soy un maldito psicólogo", dijo con tristeza. "Por favor, respete mi ocupación. No me tome por un médico común, ¿de acuerdo?".

Sobre todo, era tarde en la noche. ¿Jin Fengchen estaba tan preocupado por Jiang Sese?

Shen Mubai se quedó una vez más sin habla.

Así, Shen Mubai se encontró usado y abandonado por la pareja de padre e hijo. Todo lo que sintió fue abatimiento.

...

Dentro de la habitación, Jin Fengchen llevó a Xiaobao a la cama antes de traer un poco de agua caliente para limpiar el sudor de la frente de Jiang Sese. Finalmente, se sentó junto a la cama para vigilarlos a ambos.

El dulce Xiaobao sostenía la mano de Jiang Sese. Para nada somnoliento, se quedó allí, mirándola a la cara.

Al poco tiempo, dijo con voz preocupada: "¡Papá, la mano de la tía Sese está tan fría!".

Jin Fengchen se acercó para ver cómo estaba Jiang Sese, solo para descubrir que de hecho estaba helada. Además, sus labios también se estaban volviendo blancos. Ella estaba temblando por todas partes. Hace unos momentos, todavía estaba ardiendo.

"Papá, ¿qué deberíamos hacer? ¿Deberíamos llamar al tío Mubai de nuevo?".

Shen Mubai se habría volado la cabeza si hubiera escuchado esto. ¿Por qué lo tomaron, para convocarlo como quisieran?

Jin Fengchen lo contempló por un momento. Al final, levantó la manta y se subió debajo para envolver a Jiang Sese en su abrazo.

Jiang Sese, todavía atrapada en la tierra de los sueños, todavía sufría el dolor de que le quitaran a su hijo. Estaba acostada en la cama de hospital helada, su mundo se volvía gris a su alrededor.

De repente, sintió que algo la abrazaba y calmaba sus nervios crispados. Su corazón muy nervioso también estaba comenzando a relajarse.

Los ojos de Jin Fengchen se llenaron gradualmente de dolor mientras miraba el rostro de Jiang Sese.

"¿Está soñando con su pasado?

"¿Qué había experimentado Jiang Sese? ¿Qué la hizo sufrir tanto?".

Tal pensamiento le hizo estrechar sus brazos alrededor de ella.