Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 987

Al ver las acciones de Tiantian, Jiang Sese sintió como si un peso cayera sobre su pecho.

Se acercó, se arrodilló y preguntó: “Tiantian, ¿qué pasa? ¿Alguien te ha estado molestando?”.

Tiantian desvió la mirada, no la miró ni le habló.

Jiang Sese se giró para mirar a la profesora.

Antes de que pudiera hablar, la maestra se anticipó a lo que quería y se apresuró a decir: “Tiantian ha sido muy buena y obediente hoy, igual que siempre”.

El aspecto ansioso de la maestra no parecía que estuviera mintiendo.

“Tiantian, no ignores a Mami, ¿de acuerdo?”.

Jiang Sese fingió estar muy dolida y triste. Incluso su voz llevaba deliberadamente una pizca de sollozo.

“Mami no me quiere”, murmuró Tiantian.

Jiang Sese frunció las cejas con desconcierto y preguntó: “¿Quién te ha dicho eso?”.

“Si no es así, ¿por qué Papi y tú se quedaron con mi Hermano?”.

Tiantian por fin giró la cabeza e hizo un mohín. Sus ojos se enrojecieron lentamente.

Tenía un aspecto lamentable.

Jiang Sese se sintió bastante afligida. La tomó en sus brazos y le explicó suavemente: “Tu hermano está herido, así que Mami y Papi tuvieron que acompañarlo”.

“La Abuela podía acompañarlo”.

Jiang Sese comprendió por fin que la pequeña estaba enfurruñada porque ella y Jin Fengchen no habían ido con ella ese día.

“Tiantian, ¿quieres a tu hermano?”.

“Sí”, dijo Tiantian sin dudar.

“Tu hermano también te quiere. Ahora está lastimado, así que necesita a Papi y a Mami. Si fueras tú quien nos necesitaras, también estaríamos a tu lado, ¿entiendes?”, explicó Jiang Sese con paciencia.

Tiantian recordó que su hermano sangró mucho esa mañana. Debió de ser muy doloroso.

Comparado con su festival deportivo, obviamente, la situación de su hermano era más importante.

“Entiendo”.

Tiantian levantó su carita y preguntó: “¿Cómo está Hermano?”.

“El médico envolvió la herida con un vendaje, pero tendrá que permanecer en el hospital durante unos días”.

Jiang Sese sonrió. “¿Sigues enfadada con Mami?”.

“Lo siento, Mami. No debería ser tan egoísta”. Tiantian bajó la cabeza y se disculpó suavemente.

Jiang Sese le tocó la cabecita. “No pasa nada. Papi y Mami lamentan no haber podido acompañarte al festival deportivo”.

“No, Papi y Mami tienen que cuidar al Hermano”.

Jiang Sese sonrió agradablemente. “Tiantian es muy sensata”.

“Tiantian, vamos al hospital a ver a tu hermano”. Jin Fengchen se acercó y levantó a Tiantian.

Tiantian le rodeó el cuello con los brazos, ladeó la cabeza y preguntó con dulzura: “Papi, ¿podemos ir a comer hamburguesas?”.

“Pregúntale a Mami”.

Tiantian se giró hacia Jiang Sese.

Jiang Sese sonrió. “Por supuesto”.

“¡Sí! ¡Hamburguesas!”, animó Tiantian.

Jin Fengchen y Jiang Sese se miraron y sonrieron. Las emociones de un niño cambiaban tan rápido.

...

Fang Yuchen organizó un encuentro con Shangguan Yuan en el restaurante italiano donde se reunieron por primera vez.

Esta vez, Fang Yuchen llegó muy temprano.

Mientras esperaba la llegada de Shangguan Yuan, él de vez en cuando sacaba los regalos y los miraba. Su corazón latía con fuerza.

“Esta vez la impresionaré”, se animó.

Casi a las siete, llegó Shangguan Yuan.

“Buenas noches”.

Shangguan Yuan estaba vestida con un traje de negocios y tenía su largo cabello suelto. Su bello rostro estaba delicadamente maquillado y su comportamiento era especialmente elegante. La iluminación hacía que pareciera que brillaba con luz propia.

Fang Yuchen se levantó con mucha rapidez. Se golpeó contra la mesa y derribó un vaso.

El agua se derramó por todas partes.

Fang Yuchen se dirigió a la recepción del restaurante y luego se giró para mirar a Shangguan Yuan, que estaba allí sentada. Le dijo ansiosamente a la recepcionista: “Quiero que me den mis flores”.

La otra parte le entregó las flores.

Él dijo “Gracias”, luego se dio la vuelta, respiró profundamente, y se dirigió paso a paso hacia Shangguan Yuan.

Shangguan Yuan estaba mirando su celular cuando, de repente, un ramo de flores apareció ante sus ojos.

“Para ti”.

Ella levantó la cabeza, justo para ver la cara sonriente de Fang Yuchen. Estaba ligeramente aturdida, pero pronto se recuperó.

“Gracias”. Lo aceptó y lo colocó en el asiento vacío de al lado.

Fang Yuchen giró la cabeza hacia donde ella no podía ver y sonrió en secreto, luego volvió a su asiento satisfecho.

Después, Fang Yuchen trató constantemente de encontrar varios temas para charlar con Shangguan Yuan. Shangguan Yuan escuchaba en silencio, diciendo de vez en cuando algunas palabras. El ambiente era mucho mejor que el de la noche anterior.

Fang Yuchen levantó los ojos y miró a Shangguan Yuan. Luego sacó una caja de su bolsillo y dudó antes de presentársela.

“Señorita Shangguan, cuando estaba comprando un regalo para mi madre, vi este collar y pensé que te sentaría bien. No pude contenerme y lo compré”.

Shangguan Yuan miró la caja de franela azul que sostenía. Dejó el tenedor, cogió una servilleta y se limpió la boca, luego lo miró en silencio.

“Esto es para ti”, dijo Fang Yuchen.

Él pensó que ella aceptaría la caja, como cuando aceptó las flores.

Pero no.

La cara le empezaba a doler por mantener la sonrisa mientras repetía: “Esto es para ti”.

Shangguan Yuan sonrió ligeramente. “Lo siento, no puedo aceptar un regalo tan caro”.

El rostro de Fang Yuchen se solidificó al instante. “¿Por qué?”.

Ella no era una tonta que no supiera nada de emociones; podía ver cuáles eran sus intenciones de una vez.

Sin embargo, ella no estaba interesada.

En lugar de aceptar su regalo y engañarlo, era mejor dejarlo claro desde el principio.

“Gracias por las flores y por invitarme a cenar. Realmente espero que no seamos solo socios comerciales, sino también amigos”.