Borracho y Atrevido: ¡Besé a un Magnate! romance Capítulo 71

David cerró los ojos, deseando dejar atrás a Viviana y Cipriano en el avión.

—¡Comer, comer, voy a comer, eso ya está decidido!

Viviana, harta de la insistencia de Cipriano, decidió tomar el plato de frutas y abrazarlo mientras comía.

Cipriano mostró una sonrisa indulgente: —Sabía que querías comer; siempre dices lo contrario de lo que sientes.

...

Un tomate cereza se deslizó hacia la garganta de Viviana... Casi la asfixia.

..

En Altoviento.

Susana, que ha visto a Viviana en Instagram a través de Julia, está furiosa por lo que publicaste.

Viviana podía ver los Instagrams de Susana porque esta, a través de un amigo de un amigo, se los mostró a propósito para que Viviana sepa del affaire entre Susana y Cipriano.

Todos los Instagrams relacionados con Cipriano estaban diseñados a medida para conmover a Viviana.

Ahora, de la misma forma, Viviana ha hecho lo mismo.

Ahora, la situación se ha invertido.

Entre las personas a las que Viviana no ha bloqueado se incluyen algunas novias de los amigos de Cipriano, y una de ellas es Julia.

La última vez que Julia llevó a Viviana a un club para mostrarle cómo Cipriano estaba de fiesta con Susana y sus amigos, Viviana pensó que solo Susana podría haber instigado a Julia a hacerlo.

Después, Viviana se enteró de que el esposo de Julia quería congraciarse con la familia Herrera, así que Julia se convirtió en otra de seguidora de Susana.

Ahora que Julia ha visto su Instagram, seguramente informará a su ama.

—No voy a perder ante Viviana, esa mujer es muy inferior a mí. ¡Cipriano es mío!

Julia, horrorizada, le hizo una señal a la criada para que se vaya rápido.

La criada se levanta torpemente y sale tambaleándose.

El semblante sombrío y torcido de Susana se suavizó un poco al escuchar a Julia: —Cipriano me ama... ¿Entonces por qué quiere reconciliarse con Viviana?

—Señorita Susana, usted es joven y no entiende la mente de los hombres. Un hombre puede no amar o cuidar a su esposa, pero eso no significa que quiera divorciarse. Más importante aún, fue Viviana quien pidió el divorcio primero. Un hombre orgulloso como el presidente Cipriano, ¿cómo podría aceptar que su esposa lo abandonara? Por eso Cipriano fue a buscar a Viviana.

—Entonces, ¿él solo está enojado porque Viviana quiere divorciarse?

—Exactamente. En la mente del presidente Cipriano, una mujer como ella debería ser dejada de lado como una despreciada. Si realmente se divorciaran, sería Cipriano quien la expulsaría, no Viviana quien lo arreglara.

—Tienes razón. ¡Eso es lo que Cipriano está pensando! Pero ahora él solo piensa en Viviana, ni siquiera responde a mis llamadas, ¿qué puedo hacer para que me preste atención?

Susana agarró la mano de Julia, viéndola como su salvadora.

Julia sonrío levemente: —Señorita Susana, he escuchado que su avión aterrizará en el aeropuerto a las dos de la tarde.