¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 1028

Jay le dio a Angeline una mirada provocativa. “¿Me estás amenazando?”.

Una pizca de culpa emanó de los ojos de Angeline.

Aunque cuando pensó en lo obediente que era él al servir a Marilyn en casa, una oleada de celos la abrumó.

¡Él serviría a Marilyn por la noche y la serviría a ella durante el día!

¡Eso era justo!

“¿Y qué si lo estoy haciendo?”, dijo Angeline.

La mirada de Jay se oscureció. “Prefiero que Tempestad muera con dignidad que vivir con humillación”.

Angeline: “…”.

Su tono se suavizó y la tensión en su rostro disminuyó. Su voz tenía un toque de compromiso. “¿Qué es lo que quieres hacer?”.

“Iré al Departamento de Ciberseguridad”.

Angeline lo miró furiosamente.

La oficina de la presidenta estaba en el noveno piso.

El Departamento de Ciberseguridad en el sexto piso.

Estaban separados por tres pisos.

¿Eso quería decir que tendría que bajar si quería verlo?

Cuando Angeline miró la expresión obstinada de Jay, ella de repente sintió una punzada en el corazón. Reaciamente, llamó a Grayson y le ordenó: “Lleva a Ben al Departamento de Ciberseguridad”.

Jay no se fue de inmediato y se quedó allí mirando como si todavía tuviera algo que decir.

Angeline lo miró fijamente con gran amargura. “¿Hay algo más?”.

“Necesito una casa que esté incluida en los beneficios de los empleados”.

Angeline sacó un sobre del cajón y se lo dio. “Esto es para ti”.

“Deben haber contratado a un hombre de ascendencia real o noble, de ahí el trato diferencial”.

“Dudo que una persona de ascendencia real o noble pueda atraer la atención de una persona engreída y condescendiente como la Srta. Severe”.

“¿Quién podría ser este hombre entonces?”.

Mientras discutían, Jay abrió la puerta y entró. Como si un enorme refrigerador hubiera caído del cielo, enfrió todo el complejo de oficinas.

“¿No crees que hace un poco de frío?”. Un empleado se estremeció con los brazos cruzados.

“Esto se siente exactamente como lo que sentimos hace unos años, ¿no crees?”.

Grayson inmediatamente dejó escapar un sonido para detenerlos. “¡Cof, cof!”.

Todos los empleados se voltearon para mirar hacia la puerta. Cuando vieron a Jay de pie junto a Grayson, todos se quedaron estupefactos.

La oficina que se llenó de susurros unos momentos atrás estaba en ese momento envuelta en un silencio absoluto.