¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 1057

Al octavo día.

Jay finalmente fue a trabajar.

Tan pronto como entró en la recepción de Gran Asia en la planta baja, se encontró con Angeline y Seth discutiendo.

“Srta. Severe, ¿por qué asignó mucho menos dinero al Departamento de Empresas Titus de Gran Asia este mes?”. Seth estaba lleno de justa indignación cuando cuestionó a Angeline.

Con una mirada severa en el rostro, Angeline pronunció fríamente: “Porque tu departamento no alcanzó la meta. El bono deducido de tu departamento será transferido a otros departamentos que han superado sus metas”.

Seth se negó a aceptar esto en silencio. “Srta. Severe, usted ha tratado de reducir el nivel de Empresas Titus por los últimos tres años, y nosotros lo sabemos. Usted solo quiere que Empresas Titus desaparezca por completo, ¿no es así?”.

Angeline estaba al borde de su paciencia. “¿Tu Empresas Titus? Je, je, Seth, déjame refrescar un poco tu memoria. Empresas Titus cambió su nombre a Gran Asia hace tres años. Ahora se llama Empresas Titus de Gran Asia”.

“Esto es porque te la robaste por medios justos o viles”, rugió Seth.

Angeline estaba enfurecida por la actitud de Seth de ponerse del lado de extraños en lugar del lado de su propia familia y le gritó: “Seth Severe, te perdonaré tu irrespeto hacia mí esta vez porque eres mi medio hermano. Si haces un alboroto así frente a mí la próxima vez, ¡definitivamente no te dejaré ir tan fácil!”.

Seth estaba levemente sorprendido por el aura poderosa e invencible de Angeline, pero pronto estaba con la frente en alto de nuevo.

Conocía a Angeline muy bien. No era otra cosa que un tigre de papel.

Seth le lanzó una mirada hacia Jay que estaba de pie del lado opuesto y sus ojos emitieron una luz malvada.

Reacio a admitir que había sido superado, gritó: “¿Siquiera me consideras tu hermano? Todo lo que te importa es ese hombre. Desde que eran niños, solo lo has escuchado a él. Empezaste un reino de terror solo porque él te pidió que anexaras otras empresas. Pregúntate a ti misma, ¿cuántas familias quedaron destrozadas o desempleadas por culpa de esto?”.

Los delgados y encantadores labios de Jay se curvaron en una mueca autocrítica. Realmente se había convertido en el reemplazo de ese hombre.

Caminó con sus largas piernas hacia el elevador.

Jay miró la expresión sombría y hosca de Angeline mientras pensaba: ‘Si ese hombre es su tema tabú…’.

‘¿Qué hay de mí?’.

Él no era otra cosa que un payaso.

Cuando Angeline caminó hacia él, Jay señaló de manera cínica: “¿Hermanos matándose entre sí? ¡Ningún drama puede ser más emocionante que este!”.

Angeline lo miró sin palabras. “Él se casó con una esposa de corazón negro que fundó una pequeña compañía por fuera de Gran Asia mientras que él se escabulló en Gran Asia como un fisgón. Ambos personajes viles han estado cooperando perfectamente y en lo único que piensan es en cómo pueden intimidarme”.

En ese momento, ella se rio y dijo: “Sin embargo, lo que ellos no saben es que esta mujer aquí es la reencarnación de una bestia salvaje y mitológica que solo ataca y no retrocede. Quien quiera cambiar el statu quo tendrá que seguir soñando”.

Jay no pudo evitar reírse. Jay era un hombre perspicaz y calmado que sabía cómo hacer una clara distinción entre asuntos de negocios y asuntos personales.