¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 1287

El b*stardo de Cole había enviado a sus hombres a vigilar el lugar con el pretexto de vigilar el Patio de Brisa Refrescante.

Jay comenzó a pensar en formas de escapar del Patio de Brisa Refrescante para poder salir a buscar el registro de la fortaleza de los Yorks.

Angeline lo llamó suavemente: “Ben”. Su voz sonaba gentil y afectuosa.

Jay se dio la vuelta y entró.

“Angeline”.

Angeline rastreó el origen de la voz y se acercó a él.

Jay apresuró el paso y tomó su mano, susurrando: “Por lo que puedo ver ahora mismo, el Viejo Amo Yorks sospecha que estamos confabulados con el asesino de anoche. Ha enviado a sus hombres a rodear el Patio de Brisa Refrescante esta mañana”.

Angeline analizó la situación y dijo: “El Viejo Amo Yorks está a cargo del área frontal de la fortaleza de los Yorks y no tiene tiempo para proteger la Fortaleza 48, por lo que Cole sigue siendo la persona a cargo aquí. ¿Por qué no ponemos un cebo para alejarlo? Encontraré una manera de mantener a Cole ocupado mientras tú sales con el pretexto de recolectar hierbas para mí…”.

Jay apretó suavemente la mejilla roja de Angeline. “Te estás volviendo cada vez más inteligente, ¿no es así?”.

Aunque en su corazón, ella todavía era un corderito que no sabía nada del mundo.

Angeline dejó escapar una sonrisa traviesa. “Me enseñaste bien”.

Jay tomó a Angeline en sus brazos. Su amor por ella se intensificó.

En el desayuno, Jay expuso sus planes a otras personas y ultimó los detalles. Grayson, Josephine y la Hermana Shirley se quedarían y cuidarían de Angeline. Zayne y él irían a recoger las hierbas.

Cuando Jay y Zayne abrieron la puerta del Patio de Brisa Refrescante, Carson apareció de la nada y preguntó en un tono excesivamente arrogante: “¿A dónde vas?”.

Jay explicó: “Necesito recolectar algunas hierbas para los ojos de mi señora. Vamos a la montaña a desenterrar algunas semillas de casia para ella…”.

Carson lo interrumpió de inmediato. “Anote las hierbas que necesita. Nuestros hombres las recogerán para ustedes”.

Carson rugió a su espalda: “¡Detente ahí! No me culpes por lo que voy a hacer a continuación si no te detienes”.

En ese momento, Josephine y la Hermana Shirley llevaron a Angeline afuera. Angeline lo llamó: “Carson”.

Cuando Carson vio a Angeline, inmediatamente pasó de parecer arrogante a humilde, inclinándose y arrastrándose ante ella. “¿Qué puedo hacer por usted, Srta. Severe?”.

Angeline preguntó: “¿Dónde está tu Joven Amo?”.

Carson estaba atónito. Él respondió: “El Joven Amo se ha ido a la fortaleza de los Yorks".

Angeline se regocijó interiormente. Tanto Cole como Spencer no estaban en la Fortaleza 48. Solo Carson, el astuto lacayo, estaba allí. Podría comprarle algo de tiempo a Jaybie si pudiera detenerlo.

Angeline dijo: “Grayson, vigila la casa del Joven Amo Yorks y pídele que venga de inmediato cuando regrese. Dile que tengo algo que decirle”.

Grayson respondió: “Sí, Srta. Severe”.