¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 1817

Angeline lo tomó mientras temblaba y lo abrió, solo para ver que eran las joyas de jade que Jaybie había hecho. Era el collar que tenía los mechones de cabello dentro.

Angeline miró a Chloe, las lágrimas corrían por su rostro. Se arrojó a los brazos de Chloe y exclamó con emoción: “¡Gracias, Mamá! Finalmente me aceptas”.

Chloe le dio una palmada en la espalda y se ahogó mientras decía: “Chica tonta, tuviste que pasar por un viaje tan arduo solo por mi aprobación”.

Boye estaba de pie en la sala de estar de la planta baja, donde podía escuchar a Chloe y Angeline llorando lágrimas amargas en el piso de arriba. Ella miró hacia arriba aturdida antes de decir: “Los tiempos difíciles de nuestra Angeline finalmente terminaron”.

El Abuelo respondió: “¿Ah,sí? Realmente no fue fácil”.

En el almuerzo, Angeline llevó la silla de ruedas de Chloe abajo.

El Abuelo bromeó con Angeline, diciendo: “Si no vas a casa a comer, ¿no tienes miedo de que tu Jaybie venga a buscarte?”.

Angeline se dio cuenta de la seriedad de la situación y entró en pánico mientras decía: “¡Mierda! Estoy acabada.

Rápidamente sacó su teléfono y llamó a Josie ansiosamente.

Tan pronto como se conectó la llamada, Angeline le dijo a Josephine: “Josie, si tu hermano te llama y pregunta por mí, dile que estás conmigo”.

En la otra línea.

Josie estaba mirando al gran diablo que estaba sentado en su sofá con una expresión oscura. Por sus años de amistad con Angeline, Josie naturalmente había intentado todos los medios para ayudar a Angeline a ocultar sus mentiras.

“Hermana Angeline, estás visitando a la Abuela Boye en el Jardín Alegre. ¿Por qué no me llevaste contigo?”. Josie preguntó en voz baja y apagada.

Angeline se asustó un poco. “¿Qué le pasa a tu voz? ¿Te resfriaste?”.

Josie protestó. “No”.

Angeline estaba un poco confundida: “Entonces, ¿por qué estás hablando como si tuvieras algo atascado en la garganta?”.

Josie dijo algo aturdida: “Intenta adivinar por qué”.

Jay extendió el brazo y miró a Josie con severidad.

Josie le dijo a Angeline: “¡Buena suerte!”. Luego le entregó el teléfono a Jay.

“¡Lo haré, Mamá!”.

Después de que Angeline se fue, Boye miró la mesa llena de deliciosos manjares y le dijo al Abuelo: “La próxima vez, no hay necesidad de cocinar la porción de Angeline”.

El Abuelo respondió: “Lo sé”.

Chloe simplemente sonrió.

Angeline se escabulló de nuevo en Chalet de Turmalina y fue directamente a Cabaña Luna Voladora de Josie. Jay, Josie y Zayne estaban almorzando juntos. Cuando Angeline empujó la puerta para entrar, Jay ya la estaba mirando con resentimiento.

“¿Así que resulta que conoces el camino a casa?”.

Angeline le sonrió tímidamente. Ella estaba parada torpemente en la puerta, esperando que Jay la regañara.

En cambio, Jay solo la ignoró con una cara fría.

Ella ya lo había hecho enojar cuando le mintió, pero luego fue tan lejos como para rechazar su llamada telefónica.