¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 1889

Tammy fue lo suficientemente generosa como para compartir la historia de su primer amor con él, diciendo: “Una vez me enamoré de un chico que sentía lo mismo por mí, pero los dos éramos demasiado jóvenes y nuestros padres estaban firmemente en contra de que saliéramos. Como resultado, mis padres me encerraron en la casa y me pasaba los días llorando, hasta el punto en que traté de acabar con mi vida…”.

Tammy levantó la muñeca y reveló una cicatriz, diciendo: “Mira, casi me suicido una vez. Pero lo lamenté tan pronto como el cuchillo cortó y la sangre brotó de la herida. De repente, la muerte parecía más aterradora que los corazones rotos”.

“Después de ese día, mis padres me dejaron salir y fui a la casa de ese chico sóoo para encontrarlo besando a otra chica. Sentí que mi mundo se estaba derrumbando en ese momento”.

“Lloré todo el camino a casa y lloré en secreto durante medio mes sin que mis padres lo supieran. Eventualmente aprendí que basura como él no merecen mis lágrimas”.

Tammy se encogió de hombros, luciendo despreocupada y calmada como si estuviera contando la historia de otra persona. “El amor de un niño es a menudo puro. Pueden estar enamorados un segundo y dejar de amar al siguiente”.

Los ojos de Finn se oscurecieron. “Esa eres tú”.

Finn temía que Bebé Zetty fuera leal y devota como sus padres.

Tammy le puso los ojos en blanco. “Mis amigos son más informales que yo cuando se trata de relaciones. Algunos de ellos incluso tienen varias citas, mientras que otros salen por dinero. Pero nunca he visto a nadie mantenerse fiel y leal como lo que nos enseñan los libros”.

Finn dijo: “El hecho de que no hayas conocido a nadie así no significa que ese amor no exista. Mi padre adoptivo y su esposa se aman mucho y se comprometieron a permanecer juntos hasta el final”.

Los ojos de Tammy se agrandaron. “¿Estás hablando del Señor Ares que vino a visitarte ese día?”.

Finn asintió.

Tammy dijo con disgusto: “El Señor Ares es el príncipe heredero de la Capital Imperial, un gigante entre los hombres. Si yo fuera la Señora Severe, tampoco me enamoraría de nadie más”.

Después de una pausa, continuó: “La Señora Severe es la mujer más hermosa que he visto en mi vida. Es más, es educada, gentil y amable. Es comprensible por qué el Señor Ares solo la ama a ella. No son personas comunes, así que, ¿cómo podríamos mencionarlos al mismo tiempo?”.

Finn no era un niño de tres años. De hecho, había visto muchos casos de hombres y mujeres jóvenes profundamente enamorados pero incapaces de satisfacer su pasión. Era cierto que no había visto un amor tan perfecto como el de Jay y Angeline.