¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 1927

Luego, como Sherlock Holmes, él resolvió el acertijo. “Oh. Ahora lo entiendo. Angeline debió haber hecho algo mal y enfadó al Hermano Jay. El Hermano Jay quiere perder los estribos, pero porque Angeline está embarazada…”.

Habiendo dicho eso, Zayne miró el vientre de Angeline. “¿De verdad… estás embarazada? ¿O simplemente estás engañando a tu hombre?”.

Angeline se estremeció de miedo y miró a Jay con ansiedad.

Jay notó el parpadeo en sus ojos y sus ojos de águila se contrajeron abruptamente mientras esperaba su respuesta con una expresión seria.

Zayne probablemente pensó que las cosas no eran lo suficientemente serias y murmuró: “No has quedado embarazada en tantos años, ¿todavía puedes quedar embarazada?”.

Angeline estaba tan furiosa que apretó los puños y se apresuró a golpear a Zayne. “Maldita sea, Zayne. ¿Incluso te escuchas a ti mismo? ¿Quién dice que no puedo quedar embarazada?”.

Zayne salió corriendo y Angeline lo persiguió.

Cuando salieron corriendo por la puerta, Zayne volvió corriendo, pero Angeline se quedó quieta.

Al saber que algo sospechoso estaba pasando, Zayne señaló la nariz de Angeline y la regañó: “¿Entonces le estás mintiendo al Hermano Jay? Angeline Severe, debes querer que te den una paliza. ¿Cómo puedes bromear sobre cosas así?”.

Angeline dejó caer la cabeza y murmuró con agravio: “Él hubiera tenido una guerra fría conmigo si no le hubiera mentido”.

Zayne asumió el papel de un pacificador y dijo: “Dilo. ¿Qué hiciste? El Hermano Jay nunca te ha alzado la voz, así que, ¿cómo podría darte la espalda? Debes haber cruzado la línea esta vez…”.

“No lo hice. Iba a tener una escena de beso con un actor y él está celoso por eso…”.

Zayne preguntó: “¿Ese actor se ve bien?”.

Angeline dijo: “Por supuesto que se ve bien. Es Ash Long, un actor ganador de un Oscar. No solo es guapo, sino que también tiene mucho estilo…”.

Zayne tragó saliva. “¡Mira qué enamorada estás! Ahora sé por qué está enojado el Hermano Jay. ¡Quieres que te den una paliza!”.

En este momento, Jay salió con una expresión oscura. Había escuchado la conversación de Angeline y Zayne, y la furia en su corazón llenaba cada fibra de su ser.

No perdió los estribos y simplemente miró a Angeline con un par de ojos hoscos.

Angeline puso una expresión amarga y murmuró una disculpa: “Lo siento, Jaybie. Me equivoqué”.

Si Angeline se hubiera disculpado cuando surgió el problema, entonces quizás Jay no estaría tan enojado.