¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 1974
Sobre ¡Buenas noches, Señor Ares! - Capítulo 1974
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El Gran Viejo Amo Yorks comenzó a sospechar y preguntó: “¿Qué quieres decir?”.
Jay trató de mantener la calma y respondió: “Es solo que los hijos ilegítimos de la familia Ares son bastante obstinados acerca de que todos ustedes se quedarán en Chalet de Turmalina. Después de todo, ustedes no son parientes de la familia Ares, y su estancia en Turmalina despertó bastante los celos entre los hijos ilegítimos que no son elegibles para vivir aquí”.
El Gran Viejo Amo Yorks dijo: “Somos familia políticos de los Ares, así que ¿por qué no podemos quedarnos en Chalet de Turmalina?”.
Angeline lo consoló diciéndole: “Después de que haya pasado el momento difícil, iremos a buscarte de nuevo. ¿Por qué no sigues el consejo de Jay por ahora, Abuelo?”.
El Gran Viejo Amo Yorks miró a Angeline con una sonrisa. Angeline siempre era amable y directa con sus palabras, a diferencia de Jay, que nunca iba directo al grano. Él incluso había pasado por alto por completo la intención de su pregunta.
“Angeline, dime por qué tu Jaybie está tratando de echarnos de repente?”.
Jay temía que Angeline volviera a decir algo incorrecto y rápidamente la instó en voz baja: “¿Qué tal si no hablas por el momento, querida?”.
“Ah, vale”. Angeline sabía que sus pensamientos estaban un poco desordenados en ese momento y sus palabras no eran tan cautelosas.
Jay se volteó hacia el Gran Viejo Amo Yorks y dijo: “¿No te lo he dejado ya muy claro?”.
El Gran Viejo Maestro Yorks miró a Jay antes de gruñir. “Pequeño mocoso apestoso, no estaba hablando contigo. Le estaba preguntando a Angeline”.
Angeline procedió a cubrirse la boca y sacudir la cabeza.
Chloe acercó a Angeline hacia ella y miró a Jay de una manera molesta. Luego, criticó a Jay: “Mira cómo asustaste a Angeline. Angeline también es un ser humano, así que ¿por qué no la dejas hablar?”.
Jay miró a Angeline con sentimiento de culpa, pero ella siguió sacudiendo la cabeza hacia él, diciendo: “Estoy bien, Jaybie. Seguiré diciendo las cosas equivocadas, así que será mejor para mí no hablar”.
Sus palabras hicieron que Jay le sonriera suavemente.
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