¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 2031

Jacob preguntó con sospecha: "¿Por qué él está aquí a esta hora?".

Jacob no tuvo más remedio que saludar al Gran Viejo Amo Ares en la puerta.

Puerta de entrada del Jardín Mamut.

A pesar de caminar con una sonrisa, Jacob expresó las dudas que tenía en su corazón: "Padre, JJ, ¿por qué están aquí?".

El Gran Viejo Amo Ares dijo: “El Chalet de Tourmalina está en discordia recientemente. No puedo sentirme a gusto, así que traje a JJ a patrullar. Recién llegué al Jardín Mamut cuando escuché los gritos de Julia. Mi audición ya no es tan buena, pero escuché a Julia decir que alguien estaba transfiriendo los activos. ¿Qué está pasando?".

Jacob tenía la espalda empapada en sudor mientras decía: “Oh, Papá, no le hagas caso a las tonterías que dice Julia. Su madre está enferma y la ha ignorado. Por eso está diciendo todas estas cosas despiadadas por ira".

Julia murmuró: “No digo estas cosas por ira. Escuché que Mamá transfirió los activos...".

El Gran Amo Ares preguntó: "¿Cómo se siente tu esposa?".

Jacob suspiró. “Uff, su enfermedad vino como una avalancha. Sucedió tan abruptamente. Ni siquiera tiene fuerzas para levantarse de la cama".

Jay dijo: “Si la Tía Charlotte está tan enferma, ¿por qué no nos informaste antes? Podríamos contratar a un experto para que la revise".

Jacob respondió: "Ay, su enfermedad no es tratable".

"¿Por qué?".

Jacob explicó: “Ella es de mente estrecha y extremadamente celosa. Ella se niega a vivir en armonía con las otras mujeres mías, y eso la enfermó".

El Gran Viejo Amo Ares miró a Angeline y dijo: “Angeline, ve a ver cómo está la Tía Charlotte. Ya es casi el año nuevo. Pídele que se cuide y deje de enfadarse".

Angeline respondió obedientemente: "Sí, Abuelo".

Jacob trató de detenerla, pero como el Gran Viejo Ares había hablado, él no estaba en posición de decir nada más.

Además, Jacob no vio a Jenson por ahí, por lo que pensó que el Gran Viejo Amo Ares y Jay solo estaban aquí por coincidencia. Por lo tanto, no pensó mucho en el asunto. Luego ordenó a su sirvienta: "Lleva a la Señora Ares adentro".

Jenson se escondió debajo de la cama.

Baby Robbie se escondió detrás de un armario.

Pronto, escucharon pasos que se acercaban.

Luego escucharon la suave voz de Jay. “Angeline, no te demores mucho. Te estaré esperando afuera. No me hagas esperar demasiado".

Jenson no pudo contener su sonrisa.

Papi había enviado a la Hermana Andy y a la Hermana Roxie para que sirvieran como guardaespaldas personales de mamá.

Angeline lo tranquilizó diciendo: “No te preocupes. No te haré esperar demasiado. Diez minutos como máximo".

"Cinco minutos", ordenó Jay de manera dominante.