¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 2132

Después de decir esas palabras en un momento de enojo, Jay aún así le pidió a un doctor que viniera a echarle un vistazo a Zayne.

Después de que el doctor chequeara a Zayne, él dijo: “Una vez lleguemos a una de esas casas, le haremos un análisis de sangre para ver si el envenenamiento es grave”.

Sin embargo, la lengua de Zayne se curó casi por completo al llegar a la granja.

“Ya puedo hablar”, dijo Zayne, aunque sonaba algo poco claro.

El Señor Ares dijo: “Los malvados siempre viven más, así que no te preocupes, Dios no te estará esperando pronto”.

Zayne murmuró: “¿No puedes decir algo agradable por una vez?”.

El Señor Ares dijo: “Tu esposa e hijo rezan cada día por tu seguridad en casa. Así que tenlo por seguro que no podrás morir aunque lo intentes”.

Zayne ahora estaba un poco avergonzado y dijo: “Está bien. Me cuidaré mejor en el futuro. Solo cierra la boca”.

Después de dos horas de caminar por la carretera montañosa, el Señor Ares y los demás llegaron finalmente a la vieja granja. La granja estaba hecha de bambú, y había una estufa construida en el amplio patio fuera de la casa de bambú. Ellos notaron a una joven preparando una comida junto a la estufa.

Jay señaló con la barbilla a Zayne, y Zayne podía percibir tácitamente que este tipo estaba tratando de darle órdenes de nuevo.

Zayne habló en una voz baja y apagada: “Tengo la boca lesionada. Pídele a otro que lo haga”.

Jay no estaba dispuesto a dejarlo y dijo: “Si no liberas esa energía tuya para molestar a los demás, entonces vendrá a molestarnos a nosotros en vez”.

Con el lado astuto de Jay, él decidió hacer que Zayne fuera a molestar a un extraño mejor.

Zayne se adelantó y dijo con gracia a la chica: “Señorita, ¿sabes cómo llegar a la Tierra Sagrada?”.

Los dedos de la chica que sostenían las pinzas se movían ligeramente. Ella levantó la mirada y su par de ojos oscuros miraron a Zayne con desconfianza mientras preguntaba: “¿No eres de aquí?”.

Ella nunca había visto a un hombre tan guapo en su vida.

“Eres muy guapo, Señor”.

Una ráfaga de aire frío subió desde las plantas de los pies del Señor Ares hasta su cabeza. El estado de ánimo de Jay se volvió más sombrío debido al enamoramiento de esta chica. Entonces, él se retrocedió y le dijo a Cole: “Te toca”.

Cole sonrió un poco estupefacto.

¡Por favor! ¡Su aspecto también era excepcional!

Cole se acercó a la chica con una extraordinaria confianza y le preguntó: “Señorita, ¿puedes decirme si hay un curandero cerca? Te daré el número de teléfono del Señor Guapo”.

Los ojos enamorados de la chica estaban fijos en Jay todo el tiempo.