¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 2180

Bebé Zetty colocó de manera solemne la caja en la fosa profunda. En este momento, ella ya no podía contener las lágrimas. De repente, ella gimió de agonía.

Finn finalmente se enteró de que quizás ella estaba enterrando a alguien querido.

Bebé Zetty siempre había sido una chica melancólica y sentimental con emociones sinceras, por lo que sus llantos también podían hacer que uno derramara una lágrima.

Finn dio un paso adelante, se arrodilló en el suelo a su lado y dijo: "Mi más sentido pésame por tu pérdida".

En este momento, Bebé Zetty de repente se sumergió en los brazos de Finn, gritando de angustia.

Quizás debido a dejarse llevar por el momento, Bebé Zetty se olvidó de ocultar su identidad por un momento. Inconscientemente puso sus manos sobre los hombros de Finn. Su acción hizo que Finn se pusiera rígido.

Por alguna razón, él parecía haber sentido la presencia de Bebé Zetty.

Como si algo lo hubiera poseído, él incluso extendió las manos, queriendo abrazarla también. Al final, su lado racional prevaleció y le impidió hacerlo. Él simplemente se congeló en su lugar, permitiendo que Bebé Zetty desahogara sus emociones mientras él permanecía inmóvil.

Gale salió del campo de girasoles y fue testigo de los afectuosos gestos de Finn y Bebé Zetty. No le sorprendió en absoluto verlo.

"¿Qué le pasa?". Finn suponía que Gale podría conocer el motivo del dolor de la Abuelita.

La forma en que lloraba era exactamente igual a como lloraba Bebé Zetty: completamente inconsolable.

Gale miró la caja de cenizas dentro de la fosa y dijo: “La persona dentro de la caja es alguien muy querido para ella. Ella está triste de despedirse de ella".

Finn se conmovió un poco al escuchar esto.

A él le dolía un poco la nariz y había una emoción inexplicable en su corazón. Era como si pudiera sentir el dolor de la Abuelita.

En cuanto a Gale, cuando se volteó para mirar a la caja, no se podían leer las emociones en sus ojos. Parecían algo indiferentes pero ansiosos y preocupados al mismo tiempo.

“No estés triste, Abuelita. La vida y la muerte están gobernadas por el destino. Conocer a alguien y separarse de él ha sido todo por el destino. Deberías tratar de aceptar esto con calma".

Al ver su actitud piadosa, Finn no podía evitar preguntar con curiosidad: "¿Quién es esta persona, Abuela?".

Bebé Zetty dijo: "Ella es mi señora, la persona que me enseñó todo lo que sé".

Finn se asustó un poco. La palabra ‘señora’ se consideraba una forma antigua de dirigirse a la maestra de uno. Teniendo en cuenta la edad actual de la abuela y que ella estudió medicina, era bastante normal para ella llamar a su mentora 'señora'.

Era solo que, ¿cómo podrían las experiencias de esta abuela ser exactamente las mismas que las de Bebé Zetty?

Finn no podía evitar mirar a la Abuela con escrutinio. Él se sorprendió al descubrir que ella parecía un poco mayor que ayer. ¿Era solo su ilusión? ¿Acaso la Abuelita siempre tenía la cabeza llena de canas?

Finn sentía aún más lástima y simpatía por Bebé Zetty ahora.

Al ver lo débil que ella estaba, Finn la ayudó a enterrar a Boye. Finalmente, Finn fue a buscar una piedra y la colocó frente a Bebé Zetty y le preguntó: "¿Qué te gustaría escribir en la lápida?".