Resumo do capítulo Capítulo 2282 de ¡Buenas noches, Señor Ares!
Neste capítulo de destaque do romance Romance ¡Buenas noches, Señor Ares!, Internet apresenta novos desafios, emoções intensas e avanços na história que prendem o leitor do início ao fim.
Jay tiró de Finn y lo agarró por el cuello con fiereza. Era como un feroz leopardo que defiende a los suyos en su territorio.
Él le advirtió a Finn con maldad. "Eres doce años mayor que Baby Zetty, Finn. A partir de ahora, debes cuidarte mucho. Tienes que ser capaz de aguantar una caída y mantenerte de pie para luchar siempre y proteger a Babé Zetty. No puedes permitir que le hagan ningún tipo de daño. Tendrás que vivir una larga vida y morir por ella. No puedes dejarla sola para que se defienda por sí misma en este mundo".
Finn empezó a llorar. "Gracias, padre adoptivo, por tu bendición".
Jay lo apartó de un empujón y se burló airadamente. "¿Por qué sigues llamándome 'Padre adoptivo'?".
Finn cambió inmediatamente sus palabras. "Papá".
Jay se sentó en la silla abatidamente y murmuró: "Recuerda que eres mi yerno, y uno de los míos".
Finn asintió solemnemente. "Mhm."
Jay dijo con angustia: "Bebé Zetty es la única descendiente de Boye. No es una persona común y corriente. Si quiere vivir una vida pacífica y estable, me temo que no puede quedarse en la Capital Imperial".
"Lo sé, papá". En el camino de vuelta, Finn pensaba repetidamente en la seguridad de Babé Zetty.
La secta del veneno no había sido eliminada. Aunque el Viejo Fósil Venenoso y el Doctor Veneno murieron en el incendio, sus descendientes eran un grupo de doctores venenosos que destruirían a la humanidad. A lo que dedicaron toda su vida fue a alcanzar el más alto nivel de la medicina. Sin duda, molestarían a Babé Zetty y la obligarían a entregar las habilidades secretas de Lynne Boye.
Finn dijo: "Llevo mucho tiempo pensando sobre ese asunto. Dado que Zetty es descendiente de la señora Boye, supongo que tendría que vivir la misma vida que la señora Boye de entonces, siempre a escondidas. He decidido llevarla a un lugar donde nadie nos conozca y empezar una nueva vida allí".
Jay respiró larga y profundamente y dijo: "Te agradezco que hayas tenido la inclinación de pensar en este asunto".
Finn dijo: "No te preocupes, papá. Me gusta mucho Bebé Zetty. Cuidaré de ella y no la haré pasar por pruebas y dificultades durante el resto de su vida. La dejaré vivir una vida alegre y sin preocupaciones".
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