¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 2407

Resumo de Capítulo 2407: ¡Buenas noches, Señor Ares!

Resumo de Capítulo 2407 – Capítulo essencial de ¡Buenas noches, Señor Ares! por Internet

O capítulo Capítulo 2407 é um dos momentos mais intensos da obra ¡Buenas noches, Señor Ares!, escrita por Internet. Com elementos marcantes do gênero Romance, esta parte da história revela conflitos profundos, revelações impactantes e mudanças decisivas nos personagens. Uma leitura imperdível para quem acompanha a trama.

“Jens, ¿ya terminaste de aplicarme la ley del hielo?”, preguntó Whitney con cautela.

“No te estaba aplicando la ley del hielo”, dijo Jenson.

Ella dijo: “Estás mintiendo. Claramente estabas enojado conmigo. No te gusta que sea tu profesora”.

Él volvió a asentir. “Sí, pero no estoy enojado contigo”.

Whitney sonrió y dijo: “¿Por qué no te gusta que sea tu profesora?”.

Jenson no dijo nada. ¿Acaso la respuesta a esta pregunta no era obvia? Él era un hombre, así que, desde luego, no le hacía mucha gracia que la chica que le gustaba se pusiera delante de la clase toda distante mientras le daba lecciones con cara seria.

Además, todas las cosas que ella le enseñaba eran increíblemente infantiles.

Sin embargo, después de un momento de silencio, el astuto de Jens murmuró otra respuesta: “La universidad prohíbe que profesores y estudiantes sean pareja”.

Ella dijo: “Lo sé. Pero aún eres joven y no estoy dispuesta a involucrarme en este lío. Salgamos después de que te gradúes en la universidad”.

Jenson pensó por un momento antes de decirle con rostro severo: “Ya que no aceptas ser mi novia ahora, debería conseguir otra chica para que sea mi novia por el momento”.

Whitney exclamó horrorizada: “¡De ninguna manera!”.

Él dijo: “El amor es una asignatura obligatoria para los universitarios”.

Whitney: “...”.

Ahora ella estaba atrapada en un dilema.

“Pero si no soy tu profesora, no podré verte durante casi medio día. ¿Y si caes en la trampa de esas pequeñas descaradas?”.

Cada vez que Whitney recordaba la escena de Jens en clase y todas esas hermosas chicas peleándose para sentarse a su alrededor, le provocaba un intenso dolor de cabeza.

Jenson miró a Whitney y le dijo con una sonrisa: “Te has equivocado, Whitty. No debiste convertirte en mi profesora sino en mi compañera de clase. Así podríamos ir a clase y comer juntos”.

Ella se sintió iluminada inmediatamente. Se culpó a sí misma con furia, diciendo: “¡Oh, sí! ¿Por qué no se me ocurrió eso?”.

Él sonrió con malicia. Sabía que lo único que esta chica quería era conquistarlo.

***

La cara de Jenson se ensombreció. “No exageres, Whitney Cornelius”.

“¿Entonces por qué no estás escuchando la clase?”.

“¿Por qué eres tan aburrida?”.

Whitney: “...”.

“¡Bah!”. Al final, Whitney se dio la vuelta mientras echaba humo por la cabeza.

Whitney y Jenson estaban atrapados en una guerra fría una vez más.

Esta vez, Whitney tomó la iniciativa de ignorar a Jenson.

Él se topó con ella varias veces y tenía la intención de saludarla, pero Whitney se limitó a fulminarlo con la mirada. Detrás de esa fulminante mirada había agravios y resentimientos. Entonces, ella se daba la vuelta y se marchaba.

Jenson estaba entre la risa y las lágrimas. ¿Todas las mujeres son así de irracionales cuando están celosas?

Histórico de leitura

No history.

Comentários

Os comentários dos leitores sobre o romance: ¡Buenas noches, Señor Ares!