¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 316

Jean se rio sin inhibiciones. "Gracias por el recordatorio. Pero es difícil encontrar un espécimen tan bueno en este planeta. Esta noche, prefiero sacrificar dos de mis riñones para complacerme con esta belleza”.

Rose estaba tan asqueada que su delicado rostro estaba distorsionado. Miró a Jean mientras se abrazaba a sí misma en defensa propia.

"Amo Jean, no estoy vendiendo mi cuerpo. Estoy aquí para hablar de negocios”.

Jean no era de los que obligaban a alguien a hacer las cosas que se negaban. Como tal, simplemente le mostró un gesto. “Entonces, puedes seguir adelante e irte. Dejaré de lado ese proyecto de colaboración”.

Rose se encontraba en una situación difícil.

Jean levantó la barbilla de Rose y dijo, "¿Reacio a irte? ¡Entonces sírveme obedientemente!".

Jay miró a Rose con desprecio y negó con la cabeza antes de irse.

Bebé Zetty de repente se volteó y miró a Rose que estaba detrás de ella.

Jay extendió su mano para cubrir los ojos de Bebé Zetty. "No apto para niños”.

La voz de Bebé Zetty pareció sonar con experiencia. Era baja y suave. "Tío Jay, él tiene tres perforaciones en la oreja como Mami”.

El sonido de sus palabras llegó a los oídos de Jay como una pitón y le atravesó los tímpanos.

Se dio la vuelta abruptamente.

Entonces, vio que Jean estaba a punto de darle un beso a Rose, pero la mirada de Rose estaba fija en él.

Cuando ella vio a Jay girarse, se sintió culpable y rápidamente extendió la mano para abrazar el cuello de Jean. Cerró los ojos y se preparó para la actuación de su vida con Jean.

Solo así Jay dejaría sus sospechas.

Inesperadamente, Jay se apresuró de nuevo al frente de ellos. Estiró la palma de la mano y golpeó el cuello de Jean, haciendo que Jean cayera al suelo.

Rose miró a Jean, quien había perdido el conocimiento, y de vuelta al frío Jay. Las plantas de sus pies se preparaban para huir.

“Queenie, ¿puedes cuidar a Bebé Zetty por mí? Solo por una hora”. Jay le entregó a Bebé Zetty en sus brazos a la hermosa joven a su lado.

"Claro, Sr. Ares”.

A ella también le resultaba extraño. Obviamente, estaban en el mismo rango de edad, pero el nombre de Jay era dicho con más respeto en las calles.

"Cámbialo”.

Rose se mordió los labios. ‘Maldito, tienes que preocuparte por asuntos menores.’

“Sí, Señor Ares. ¡Cuando vea a alguno de ustedes en el futuro, los llamaré Señores! ¡Señor Jean!”.

El hermoso rostro de Jay perdió el ánimo ante ello. "No hay necesidad de eso”.

Rose lo miró con desconcierto. Ella tardó un poco en reaccionar. "Entonces, ¿debería llamarte Amo Jay?".

‘¿Cuál es el problema de este tipo? ¿Por qué pretende ser delicado? ¿No estuvo bien cuando lo llamé Señor Ares antes?’.

"Solo el primer nombre”.

Rose casi se ahoga. Diablos, ¿la familia Ares estaba produciendo una gran cantidad de pervertidos?