¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 503

Al llamar a los miembros de su grupo de expertos a la oficina, Jay preguntó descaradamente: "¿Cuánto saben acerca de pegar protectores de pantalla en los teléfonos?".

Los miembros estaban atónitos, conmocionados por la confusa pregunta que se les lanzó. Sin embargo, bajo la mirada feroz y depredadora del presidente, solo podían saquear sus cerebros en busca de respuestas a su pregunta.

"Los protectores de pantalla suelen ser colocados en puestos callejeros, Sr. Presidente".

"Los puestos callejeros normalmente están en lugares donde estará mucha gente".

"Normalmente bajo los puentes".

El tono de Jay fue definitivo cuando dijo: "Preparen las herramientas necesarias. Esta noche instalaré un puesto debajo del Puente Cielo Arcoiris".

Grayson y el resto quedaron boquiabiertos ante la noticia. "Sr. Presidente... Usted... ¿Quiere montar un puesto callejero?”.

Jay asintió levemente.

Sin atreverse a ahondar más, Grayson y el resto se disculparon y se fueron rápidamente.

“¿Ha sufrido el presidente algún tipo de conmoción psicológica recientemente, Sr. Grayson? ¿Por qué tendría el repentino deseo de colocar protectores de pantalla debajo de un puente?".

“¿Imagínense el frenesí que causaría si se supiera la noticia? El presidente de Gran Asia colocando protectores de pantalla debajo del Puente Cielo Arcoiris... ".

"¿Quizás el presidente quiere probar la normalidad?", Grayson comprendió.

Todos estaban confundidos.

...

Una secretaria se acercó a Grayson con una sonrisa de un millón de dólares mientras informaba con entusiasmo: "Alguien lo está buscando, Sr. Gray".

"¿Quién?".

"Lo sabrá cuando llegue".

En el mostrador de recepción.

Tres adorables bebés estaban sentados en silencio con sus mochilas escolares a la espalda. Grayson se acercó y se sorprendió cuando encontró a los pequeños amos y la pequeña dama de la familia Ares.

"¿Por qué están aquí?", preguntó Grayson.

Los niños lo miraron con dulzura.

“¿Están buscando al presidente? Vengan conmigo, los llevaré allí".

"¿Papi compró rosas recientemente?".

"Sí".

"¿Para quién?".

"No puedo decirte eso", respondió Grayson con una expresión de impotencia.

Jenson caminó hacia la puerta. "Entonces, buscaré a papi ahora mismo y le rogaré para que tú nos lleves a la escuela".

Grayson soltó rápidamente: "Una cuidadora en el centro médico llamado Lenny Loyle".

Satisfecho con la respuesta, Jenson reveló una sonrisa astuta.

Luego, le dio unas palmaditas en la cabeza a Grayson con una madurez inadecuada para un niño tan joven. "¡Buen chico!".

¡Grayson se quedó helado con una mirada de estupor en su rostro!

¡Este chico era demasiado traicionero!