¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 64

Rose se sentó deprimida en el suelo.

Ella arrastró su cuerpo cansado con el corazón dolorido y regresó a Pueblo Esplendor. Los dos niños estaban profundamente dormidos y Rose se sentó en el sofá abrazando sus rodillas. Ella puso su cabeza entre sus rodillas y sollozó tristemente.

¡Estaba preocupada por Jenson!

También sentía compasión por Jay.

Sentía que no podía hacer nada por ellos, y eso la entristecía y desesperaba aún más. Bebé Robbie se despertó por los sollozos de vez en cuando en la sala de estar. Se puso las pantuflas y se abrió paso hacia la sala de estar. Sus manitas abrazaron suavemente la cabeza de mami, “Mami, ¿qué te pasa?”.

Rose miró hacia arriba y Bebé Robbie vio los ojos rojos, llorosos e hinchados de mami. Inmediatamente, él se sintió desconsolado. “Mami, ¿tu jefe te trató mal?”.

Una llama de enojo brilló en los ojos de Bebé Robbie. Él sabía que si mami trabajaba en la compañía de papi acabaría por ser tratada fatal por este. Inmediatamente pensó que él y Jenson no deberían haber intentado que papi y mami volvieran a estar juntos.

Rose abrazó a Bebé Robbie. Ella dijo con extrema tristeza: “Bebé Robbie, mami acaba de perder su trabajo. Mi jefe me echó de la empresa”.

El Bebé Robbie dijo enojado: “No importa, mami. Si no eres bienvenida allí, ¡serás bienvenida en otro lugar! Aquí es donde no tienes que mantener la paciencia”.

Rose dijo a Bebé Robbie en tono de disculpa, “Bebé Robbie, mamá decidió mudarnos a todos de regreso a Europa”.

Bebé Robbie reaccionó bruscamente: “¿Eh? ¿Cuándo nos vamos?”.

“¡En dos días!”.

Bebé Robbie regresó a su habitación y estaba ansioso por contarle a Jenson las malas noticias. “Jenson, volveré a Europa pasado mañana. ¿Qué debo hacer?”.

Cuando él miró los mensajes de texto en el reloj, encontró un mensaje sospechoso que decía: "Jenson, volveremos a Europa pronto. ¿Qué debo hacer?".

El hermoso rostro de Jay se puso de repente furioso.

Él no podía pensar en nadie más que Rose quien había enviado ese mensaje a Jenson.

Él la obligó a alejarse ayer y ella le envió después este mensaje de texto a Jenson en medianoche. Sabía exactamente lo que pensaba hacer.

'¡Qué malvada!'.

En ese momento, una llamada llegó de repente de Josephine. Era como si alguien le hubiera arrojado petardos. Ella gritó preocupada, “Jay, ¿sabes que tu hijo ha salido de casa en secreto?”.