¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 751

Cole dijo: “Es fácil hacer que tu padre regrese, siempre que tu madrastra desaparezca de este mundo”.

Angeline no sabía si reír o llorar. “Realmente quisiera abrirte el cráneo y ver que hay dentro. Aparte de querer frecuentemente que los otros desaparezcan de este mundo, ¿tienes otra solución?”.

Cole se frotó la nariz por la vergüenza y sonrió sin decir nada.

La persona parada enfrente de ella era la ley que controlaba la vida y la muerte de los otros, ¡pero ella no lo creía!

Shirley miró a Cole y a Angeline con una sonrisa un poco reservada.

Sabiendo que Shirley había mal entendido su relación con Cole, Angeline señaló a la puerta con su quijada. “Ya te puedes ir”.

Cole frunció sus delgados labios, una mirada herida apareció en su cara. “Quemas el puente después de haber cruzado el río. Cada vez que terminas de usar a los demás, te vuelves hostil y rehusas reconocerlos”.

Angeline se sintió un poco culpable. “Entonces, puedes irte después del almuerzo”.

Cole tampoco se contuvó. “Está bien”.

Angeline estaba aturdida. Ella solo lo había dicho casual, pero él se lo tomó en serio.

Angeline se llevó a Shirley, quien estaba espiando, a la cocina mientras le decía a Cole: “Siéntete como en tu casa. Iré a prepararte el almuerzo”.

Cole realmente consideraba ese lugar como su casa y anduvo por ahí libremente.

En la cocina.

Shirley se rio de oreja a oreja. “Pequeña Angeline, yo pienso que él está muy interesado en tí”.

Angeline colocó sus manos en sus caderas y le dió una mirada preocupada. “No pienses eso solo porque se ve muy bien arreglado. Él no es un hombre de fiar. Sus palabras son demasiado exageradas y claramente él es el hijo malcriado de una familia rica”.

Shirley dijo: “Pero la manera en que te mira es sincera. Es un hecho que le gustas”.

Angeline empezó a reír. “Hermana Mayor, él personalmente me dijo que podría darme todo menos amor. Yo, por otro lado, solo quiero amor y nada más. Ya ves, él y yo no nos podemos mezclar. Nunca estaremos juntos”.

“Pequeña Angeline, te quiero preguntar algo”.

Angeline se sintió inexplicablemente triste cuando escuchó el tono de Shirley. Ella guardó su celular y dijo seriamente: “Cuñada, adelante, pregúntame”.

Shirley preguntó: “La chica que vino a nuestra casa contigo la última vez… ¿Ella es la ex-novia de tu hermano?”.

Angeline se veía afligida. Ella realmente no sabía si debía decirle a su cuñada sobre Josephine y Zayne.

“Hermana Mayor, es mejor si no lo sabes. Cuando estamos vivos, raras veces estamos confundidos. Pero si lo sabemos todo, tal vez no seamos felices”, dijo Angeline.

Shirley dijo, “No me importa el pasado de tu hermano. Es solo que cuando fui a la Capital Imperial el otro día, vi a esa chica ser molestada por varias superestrellas en el estudio de fotografía. Pensé que como ella es una buena chica, ella no debería ser reducida a tal situación. Así que le dije a tu hermano sobre ella. Yo no sé si él la ayudó, pero siempre estoy preocupada por ella en estos días. Pequeña Angeline, ¿por qué no me ayudas a ver si su situación mejoró?”.

Angeline estaba demasiado sorprendida para hablar.

Para que Shirley tuviera tal tolerancia hacia la ex de Zayne, su mente realmente no era como la de una mujer usual.