¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 756

Jack no tenía experiencia con esto y se puso nervioso después de escuchar lo que la Señora dijo. Después de todo, el niño en la barriga de Sera era un hijo de su propia sangre.

“Prepara el carro y vamos al hospital inmediatamente”.

Así, la Señora empacó la bolsa de parto y llevó a Sera a la Capital Imperial durante la noche junto con Jack.

Primero, fueron a un hospital privado de ginecología y obstetricia. El equipo y la tecnología de este hospital solo estaba un poco por debajo del Gran Asia.

Sin embargo, después que el doctor le hiciera un chequeo a Sera, llegaron malas noticias: “Ella tiene sangre Rh negativa que es poco común, lo que la hace propensa a hemólisis durante el parto. No hay suficiente sangre en nuestro banco. Si quieren estar seguros, es mejor que vayan al Hospital Gran Asia”.

Jack y la Señora estaban conmocionados por la noticia: “¿Cómo terminó así?”.

El médico los criticó: “Ella tiene sangre Rh negativa, ¿no lo sabían? ¿Cómo pudieron ser tan descuidados? ¿Cómo le hicieron los chequeos anteriores?”.

Jack y la Señora estaban reacios a ir al Hospital Gran Asia, así que a los dos les tomó tiempo decidirse.

En ese momento, se oyó el llanto desgarrador de Sera: “Ah, me duele. ¡Me está doliendo!”.

El doctor dijo: “Apresurense y transfieranla al hospital. Si prolongan la espera, me temo que le pasarán cosas malas a la madre y el hijo”.

La Señora le rogó a Jack con ojos rojos: “Amo, vamos a llevarla al Gran Asia. ¡Es tu hijo el que ella está esperando!”.

Jack asintió con una expresión hosca.

Él quería tanto a su hijo que nunca se calmó lo suficiente para pensar por que el obstetra del Chalet de Turmalina había solicitado retirarse esa noche.

¿Por qué el obstetra nunca les había dicho que Sera tenia la terrorífica sangre Rh negativo?

Entonces ellos llevaron a Sera al Gran Asia nerviosamente. Después que el obstetra del Gran Asia revisó la condición de Sera, él hizo una solicitud. “Necesitamos que los miembros de la familia den su firma en persona, de otra forma no nos atrevemos a hacer esta operación. Después de todo, ustedes dos no son los miembros de su familia”.

Jack estaba muy molesto. “Todos sus parientes están en la Ciudad de Golondrina. Será demasiado tarde cuando ellos lleguen”.

“Si los llama de una vez, no será tan tarde”. El doctor levantó su muñeca para mirar su reloj y le recordó.