¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 818

“¿Porque me estaba cargando cuando se fue?”, Angeline reprimió su entusiasmo y fingió preguntar con calma.

Cole recordó el incidente de ese día, y todavía había un miedo persistente en su corazón. “Estabas inconsciente ese día y la sangre salía por cada abertura de tu cabeza. Todos pensaron que seguramente estabas muerta. Cuando Josephine te cargó en su espalda y te llevó escaleras abajo, ya estabas cubierta de sangre. Jay te llevó a sus brazos de inmediato. Yo pensé que él te iba a dar tratamiento de emergencia, pero terminó huyendo contigo en sus brazos…”.

“Angeline, ese día estaba muerto de miedo. Por eso no pude reaccionar a tiempo para salvarte. Después del incidente, lo lamenté terriblemente. ¿Por qué le entregué a mi amada mujer a otro hombre así nada más?”.

Angeline murmuró: “No te culpo, eres tímido…”.

Cole no estuvo de acuerdo. Él quería competir con Jay en todo. “Angeline, no fui el único que se sorprendió. Jay también estaba estupefacto al ver tu rostro. Cuando él te vio, sus pupilas estaban… Estaban… dispersas. Hmph, él no es más valiente que yo…”.

Él todavía estaba diciendo todo tipo de cosas para demostrar que era más fuerte que Jay.

Sin embargo, Angeline temblaba vigorosamente.

¿Jay fue realmente desalmado con ella? Ella ya estaba un poco insegura.

Como una flor que florece en la niebla, era difícil distinguir qué era verdad y qué no.

Como si alguien hubiera inyectado una gota de agua fresca de manantial en el pozo seco de su corazón, ella sintió que estaba volviendo a la vida.

Cole apretó los dientes amargamente ante la mención del nombre de Jay. “Si Jay no hubiera arruinado todo esto ese día, ahora serías mi mujer, Angeline”.

Angeline miró fijamente a Cole y vio el indicio de determinación en sus ojos. Ella sintió un escalofrío recorriendo su columna vertebral.

Ella estaba contenta de que Jay hubiera aparecido a tiempo para rescatarla ese día.

Angeline estaba extremadamente furiosa con Cole. “Cole Yorks, si tienes las agallas de volver a tenderme una trampa la próxima vez, te juro que nos convertiremos en enemigos jurados”.

Cuando Cole notó cómo Angeline estaba temblando de rabia, finalmente se dio cuenta de cuánto dolor le habían causado sus acciones.

“Yo simplemente te amo, eso es todo”. Él se sintió agraviado.

Jay y Finn regresaron a la Villa en la Calle Manzana. Esta era originalmente la villa de la familia Severe, pero Jay se las había arrebatado con conspiraciones simplemente porque le preocupaba que Angeline sufriera una derrota al competir por la herencia y la fortuna de la familia Severe con ese temperamento no participativo de ella.

Ella tampoco era alguien que tuviera un fuerte apego a su familia.

En ese caso, él le guardaría la mejor propiedad de la familia Severe.

La propiedad fue adquirida a nombre de Angeline.

Quizás fue porque la villa le pertenecía a Angeline que Jay no sintió una fuerte resistencia a ese extraño entorno.

Este era un nuevo entorno para Finn, por lo que no tuvo más remedio que familiarizarse con él.

Él caminó y revisó el lugar.

Al final, él sacó una caja de madera de algún lugar y se la llevó a Jay con una mirada curiosa en su rostro. Le informó: “Acabo de hacer un descubrimiento impactante, Presidente Ares”.