¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 841

Resumo de Capítulo 841: ¡Buenas noches, Señor Ares!

Resumo do capítulo Capítulo 841 de ¡Buenas noches, Señor Ares!

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Ella se arrastró hacia él y lo ayudó con su ropa.

Jay vio que sus manos temblaban intensamente. Era evidente que ella estaba nerviosa y asustada.

Sus malas tendencias hacia ella se desvanecieron instantáneamente. “Angeline, ¿crees que vale la pena vender tu cuerpo por tu compañía?”.

Angeline estaba sorprendida. Ella dijo: “La compañía está en quiebra y más de 100 empleados del Grupo Severe perderán sus puestos de trabajo. Además, no tengo dinero para pagar la deuda. Cuando eso suceda, solo puedo disculparme por mis errores con mi muerte”.

De repente, Jay la agarró de la muñeca con rudeza. “¿Qué dijiste?”.

¿Disculparse por sus errores con su muerte? Él no trabajó tan duro por ella para que se suicidara.

Angeline lo miró a los ojos enojados de él con valentía. “Señor Ares, tú eres ambicioso y no quieres darles una salida a otras compañías. ¿No tienes miedo de que el karma te haga sufrir por hacer tantas cosas malas?”.

Jay aumentó su fuerza en la muñeca de ella mientras el brillo maligno en sus ojos se volvía más intenso. “No tengo miedo”.

‘Siempre y cuando tú estés bien’.

Angeline apartó los dedos de él uno por uno y apartó su muñeca que estaba empezando a doler después de ser sostenida por él. Ella se puso de pie y caminó hacia la puerta.

Ella no tenía esperanzas de poder revivir el amor que él alguna vez sintió por ella.

“Vuelve”, gritó Jay de repente.

Angeline se dio la vuelta y lo miró desde lejos.

“Limpia este desastre”, ordenó Jay.

Él necesitaba tiempo para recomponerse y descubrir cómo debería tratar con ella.

Esta chica fue capaz de rebajarse para halagarlo por el bien del Grupo Severe.

Si fuera otro hombre, ¿ella le vendería su cuerpo a él también?

Cuando él pensó en esto, pudo sentir la ira creciendo en su pecho.

Jay cerró los ojos por el dolor. Angeline se había hecho cargo del Grupo Severe. Si no podía detenerla, él simplemente la ayudaría.

El Grupo Severe obtuvo su permiso y pudo operar de forma normal.

Esta fue una gran noticia. El viejo amo estaba extasiado.

Sin embargo, Angeline era como una marioneta que había perdido su alma. Fuera del trabajo, rara vez sonreía.

Por otro lado, hubo algunos pequeños cambios en su cuerpo.

Sin embargo, ella estaba demasiado ocupada con el trabajo, por lo que lo descuidó.

Como presidenta ejecutiva de la compañía, tenía que ir a muchas cenas.

Además, la Empresa Severe se recuperó y necesitaba más trabajo, así como socios. Por esta razón, Angeline no perdió ninguna oportunidad y actividad para mezclarse con familias adineradas.

Un día, ella recibió una invitación especial.

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