¡Canalla! ¿Satisfecho con mi muerte? romance Capítulo 141

Nicanor titubeó un momento, pero al final asintió con la cabeza.

En el camino al manicomio, no podía dejar de temblar. No entendía por qué sentía tanta tristeza, pero no podía sacarme de la cabeza la imagen de aquel cuarto ennegrecido por el humo, el fuego, el humo espeso, los gritos desesperados. Compartiendo habitación con Kent, sabía que su espalda estaba marcada por cicatrices grotescas, sus manos y sus piernas también estaban quemadas, ya entendí que eran las heridas dejadas por aquel incendio, debió sufrir mucho en aquel entonces.

"Este manicomio fue cerrado más tarde, el director fue arrestado, porque salió a la luz que maltrataba a los pacientes".

De camino allá, busqué información sobre el manicomio y encontré un sinfín de escándalos horripilantes. Decían que los doctores se divertían a costa de los pacientes con enfermedades mentales, los torturaban y maltrataban con electroshocks, ahogamientos, asfixia y un sinfin de torturas. En fin, la maldad humana se magnificó al infinito en ese lugar.

"Además de que atraparon al director, quien murió de un infarto en prisión, los otros doctores que no fueron condenados, parece que murieron uno tras otro en los siguientes años".

Me di cuenta de algo y me senté derecha de golpe, ¿era una coincidencia? Muchos de esos doctores murieron en accidentes, accidentes de tráfico, caídas desde edificios, ahogamientos. Alguien publicó un post diciendo que aquello era el karma por lo que hicieron con los pacientes del Hospital psiquiátrico San Rafael.

Ese post me puso nerviosa, ¿era todo esto realmente coincidencia? Si la muerte de esos doctores no fue casualidad, ¿podría estar relacionada con los asesinatos en serie del orfanato?

De repente sentí un dolor intenso en la cabeza y me agarré el pelo intentando mantener la calma, trataba de pensar que debía ser un accidente o tal vez solo una coincidencia.

"Siempre he creído que lo que va, viene", dijo Nicanor sin añadir más, y al bajarse del carro me abrió la puerta.

"¿Qué estaba intentando hacer?", pregunté con la voz ronca, casi como si me preguntara a mí misma. Kent era un genio, un completo prodigio en matemáticas y finanzas, pero, ¿por qué estaba obsesionado con calcular el valor de pi?

"El médico que destapó el escándalo del manicomio dijo que el joven estaba ansioso por demostrar que todo tenía un patrón, como pi que se puede calcular hasta el final, que el tiempo podría volver a empezar, que las almas podrían existir en diferentes dimensiones como seres multidimensionales, que todo es calculable, que solo había que encontrar el patrón".

Evidentemente, Nicanor tampoco lo entendía. En el mundo de un loco, todo era posible.

Miré las paredes llenas de números con asombro, como si estuviera sumergida en agua helada. Cuando todo tiene un patrón, cuando el tiempo puede retroceder, cuando las almas pueden renacer; cubrí mi boca con la mano sorprendida. Kent, ¿quería probar que el mundo actual era una ilusión, que nada era real, o quería demostrar que después de muchos años, todo empezaría de nuevo?