De repente, me dio por curiosear sobre Kent, también sobre lo que había entre él y yo. Estaba claro que él conocía a 'Nayra', sin embargo, yo lo había borrado completamente de mi memoria, no solo lo había olvidado, sino todo sobre el orfanato. ¿Desde cuándo había empezado a olvidar? ¿Y desde cuándo Kent me esperaba en el orfanato? Todo lo que le había pasado a él, ¿tendría algo que ver conmigo? Tenía demasiadas dudas que quería resolver.
...
Parecía que había problemas en el Grupo Linares, no iba a ser tan fácil que le dejaran a Kent manejar la compañía. Felipe tuvo problemas, Federico también, y el único que podía estar al mando de la familia Linares por el momento era Kent.
Pero Braulio, a propósito, estaba esparciendo rumores en la empresa de que él estaba loco, haciendo que todos los ejecutivos y directores se unieran en su contra para hacerlo renunciar al control.
"Joven, hay problemas en la empresa, tiene que venir conmigo", le dijo Nicanor desde fuera de la puerta.
Kent levantó la cabeza, mirándome con una impaciencia evidente: "Nayri, qué fastidiosos que son".
Parecía que él deseaba que toda esa gente simplemente desapareciera.
"¿Quieres que te acompañe?", me levanté para vestirme y salir con él.
"Nayri, quédate en casa esperándome", él negó con la cabeza, su cara pálida aún marcada con la huella de una bofetada. Tenía la piel tan clara, que el golpe se veía demasiado rojo e hinchado.
Desvié la mirada y le dije: "Hazle caso a Nicanor en todo, no seas caprichoso, no actúes impulsivamente".
Kent asintió y se fue de la habitación. Ya podía estar segura de que su cambio de actitud no solo era una ilusión mía. En público y frente a mí, definitivamente mostraba dos caras diferentes, incluso su aura cambiaba; en el momento en que salió por la puerta, incluso su silueta irradiaba una presión.
Me reí, y a propósito imité la forma en que ella hablaba antes: "¿Renán? Está duchándose, no puede atender tu llamada ahora".
Todavía recuerdo cuando tenía tanto dolor que me desmayé y me llevaron al hospital sangrando mucho; necesitaba dinero urgentemente y llamé a Renán para pedirle que viniera a verme. ¿Y él? Él estaba despilfarrando dinero, acompañando a esa mujer en una fiesta lujosa en un hotel, lo llamé desesperada muchas veces, pero quien contestó al final fue ella. Ella me provocó, diciéndome que Renán estaba duchándose y no tenía tiempo para mis llamadas.
¡Jajaja, qué irónico era que las cosas cambiaran!
Yuria, del otro lado, parecía estar a punto de enloquecer, gritándome: "¡Ainara, crees que él realmente te ama? ¡Él ama a Nayra, tú solo eres un reemplazo, una falsificación que nunca podrá tomar su lugar! Su interés en ti es solo porque te pareces a Nayra, ¡tarde o temprano te abandonará!".
No pude evitar sonreír irónicamente y me froté la oreja mientras Yuria decía que Renán amaba a Nayra.

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