Cásate conmigo de nuevo romance Capítulo 1689

Jepherson se agachó y entró en el coche. Sostuvo el rostro de Raeleigh y la besó. "Vamos a casa."

En ese momento, Stuart ya estaba en el auto. Acto seguido, el conductor arrancó el coche y se dio a la fuga. El resto de la gente hizo lo mismo. En el auto, Stuart preguntó: "¿Qué pasa con Flynt?"

Jepherson preguntó: "¿No lo has encontrado?".

"No aún no."

Stuart lo encontró extraño y se preguntó por qué no se podía encontrar a Flynt.

Jepherson miró por el espejo retrovisor y dijo: "Prende fuego a todo el pueblo. Asegúrate de que no haya víctimas. Dado que la frontera está en llamas, a la gente no le parecerá sospechoso. Flynt plantó una gran cantidad de amapolas cerca de la frontera. parece que está tramando contra nosotros. No podemos simplemente dejarlo pasar".

Stuart preguntó: "¿Crees que Flynt todavía está en el pueblo?"

"No lo conoces lo suficiente. Debe haber huido mientras estábamos en el bosque".

Después de decir eso, se apoyó en Raeleigh. Justo cuando Raeleigh estaba a punto de decir algo, no pudo evitar preocuparse por el estado de Jepherson.

Jepherson se apoyó contra Raeleigh, su cara estaba tan pálida como una sábana. Raeleigh levantó la mano para tocarle la cara. Cuando recordó la escena en la que Jepherson prefería morir en el bosque antes que seguirla, de repente sintió un pinchazo en el corazón.

¡Se dio cuenta de que lo hizo a propósito!

Él la arrinconó y ella no tuvo más remedio que decirle cuál era el sexo del bebé. ¡Era tan inteligente!

Cuando el auto se detuvo en el hospital, Raeleigh aún estaba despierta. Stuart abrió rápidamente la puerta y ayudó a bajar a Jepherson. Los médicos inmediatamente trajeron una camilla. Jepherson se acostó en la camilla y le dijo a Raeleigh. "Por favor, no te vayas".

Raeleigh fijó sus ojos en él, "Estás a punto de morir, ¿por qué sigues siendo tan irrazonable?"

El sudor perlaba la frente de Stuart. La vida de Jefferson pendía de un hilo. ¿Podrían cortarlo de una vez?

Parecía que la respuesta era no.

Jepherson le dijo a Stuart: "¿Puedes vigilar a Raeleigh? Si se va, no vuelvas hasta que la encuentres".

Stuart dijo apresuradamente: "No se preocupe, señor Jepherson".

Jepherson miró brevemente a Raeleigh antes de cerrar los ojos mientras lo llevaban a la sala de emergencias.

Stuart entró al hospital con Raeleigh mientras hacía una llamada telefónica a Lucy. Mientras Jepherson estaba en la sala de emergencias, a Raeleigh también le revisaron las heridas. Aunque sus heridas no eran tan graves como las de Jepherson, al médico todavía le preocupaba que se infectara si no se trataba adecuadamente.

"Consígueme el cirujano plástico". El médico ordenó de inmediato. Había un corte profundo en el cuerpo de Raeleigh. Si no se tratara adecuadamente, definitivamente dejaría una cicatriz y las consecuencias serían inimaginables.

Stuart contactó inmediatamente al cirujano plástico. Lucy también llegó al hospital en este momento. Después de ver a Jepherson, Lucy fue a ver a Raeleigh, mientras que Stuart fue a ver a Jepherson.

Raeleigh estaba básicamente envuelta como una momia cuando salió de la sala de tratamiento. Lucy respiró aliviada cuando la vio. El médico le informó a Lucy que Raeleigh estaba bien y que solo necesitaba cuidar sus heridas.

Lucy luego acompañó a Raeleigh a la sala para descansar. En ese momento, Zorion y el resto de la gente también llegaron al hospital. Conversaron brevemente y no mucho después de eso, Jepherson fue sacado de la sala de emergencias y llevado a la misma sala que Raeleigh.

Para entonces, Jacky, Deanna, Zorion y Rossie ya habían llegado.

En el momento en que Deanna vio a Raeleigh acostada en una cama como una momia, no pudo evitar llorar. Si no fuera porque Jacky la retuvo, habría corrido al lado de Raeleigh.

Rossie mantuvo la calma. Cuando vio que Raeleigh los miraba, dijo: "Vamos, salgamos. Necesitan descansar".

Deanna miró a Raeleigh y dijo: "Descansa bien. Estaré afuera. Llámame si necesitas algo".

Raeleigh miró fijamente a Deanna. Realmente no necesitaba nada y ya tenía algunas personas cuidándola.

Jacky salió de la habitación y fue seguido por Stuart. Lucy se quedó en la sala para cuidar de Raeleigh.

Después de que todos se fueron, Raeleigh miró a Lucy y dijo: "Gracias".

"No te preocupes. El médico dijo que todo se ha solucionado. Todo lo que necesitas hacer es descansar un poco".

Lucy cubrió a Raeleigh con una colcha. Raeleigh estaba realmente cansada, así que cerró los ojos y se durmió.

Raeleigh no durmió bien en toda la noche. Se despertaba de vez en cuando porque se sentía incómoda.

Raeleigh entonces entendió por qué Stuart permitió que Lucy se quedara en la habitación mientras él se sentaba afuera. Él sabía que su herida podría picar y ella estaría tentada a rascarse. Sin embargo, no era que quisiera rascarse la herida, pero le picaba mucho y cada vez que estaba a punto de estirar la mano y rascarse la herida, Lucy la detenía. Luego, vendó la mano de Raeleigh con una gasa especial. De esta forma, Raeleigh no estaría tentada a rascarse.

Lucy dijo: "Tu herida no es grave, pero no debes rascarte aunque te pique o te deje una cicatriz".

Raeleigh entendió. Jepherson hizo esto por su propio bien, pero Raeleigh no pudo evitar rascarse porque le picaba mucho.

Raeleigh hizo todo lo posible por pasar toda la noche sin rascarse y finalmente se durmió cuando el sol comenzó a salir.

Jepherson no podía oír los sonidos de Raeleigh moviéndose en la cama, así que abrió los ojos y se sentó en la cama. Después de todo, parecía que sus heridas no eran tan graves como las de Raeleigh.

Se levantó de la cama y decidió ver cómo estaba Raeleigh. Dejó escapar un suspiro de alivio cuando la vio profundamente dormida. Así que aprovechó este momento para ir a hablar con Jacky y los demás que estaban sentados fuera de la sala.