Castigado por su amor romance Capítulo 1111

Gloria comenzó a reír de repente y respondió: “Ja…ja, ja, ¿hablas en serio? Entonces, ¿por qué le ocultaste la verdad a todos y dijiste que Selene era tu hija adoptiva y la de Jade?”.

Lincoln replicó: “Jade dio a luz gemelos; uno de ellos falleció a los pocos días de nacer, pero Selene sobrevivió. En un principio, quisimos organizar un gran banquete, entonces descubrimos que tú y yo teníamos algunos bienes en común. Dejaste nuestro matrimonio en bancarrota, pero la propiedad común todavía estaba a mi nombre…”.

La sonrisa de Gloria parecía decepcionada al decir: “Te preocupaba que reclamara la propiedad, te preocupaba que te demandara en la corte, además tú y Jade se unieron mientras yo estaba embarazada; incluso tuvieron hijos juntos, ¿así que pensaste que usaría a los niños como evidencia? ¡Por eso le mentiste a todos y dijiste que Selene no es tu hija biológica!”.

Lincoln asintió. Miró a Gloria y lloriqueó mientras le suplicaba: “Gloria, si Selene no fuera mi hija, yo nunca habría hecho a Sabbie pagar por sus crímenes. Sabbie es su hermana mayor después de todo…”.

"¡Deberías caer muerto!". Gloria levantó el pie y pateó a Lincoln con fuerza.

“¿Selene es tu hija y Sabbie no lo es? ¿Su hermana mayor? ¿Entonces porque es su hermana mayor, tiene que cargar con la culpa de su hermana menor? ¡Eres su padre! ¡Y Jade es su madre! ¿Por qué ustedes dos no asumen la culpa de los problemas de su hija?”.

Lincoln no dijo nada. “…”.

Bajo el intenso interrogatorio de Gloria, Lincoln titubeó y no respondió o quizás prefirió no hacerlo.

Por su parte, Sabrina apretó los dientes con fuerza y ​​rabia, hasta el punto en el que sintió que se le iban a romper.

Sabrina se acercó a su madre y la ayudó a sentarse en una silla con delicadeza. Miró a Lincoln, quien permanecía inmóvil en el suelo y preguntó con calma: "¿Papá?".

En ese momento, Sabrina no pudo obtener más respuestas de él, por lo que solo dijo con frialdad: “Lincoln, nunca me apoyaste financieramente. No solo eso, me humillaste y me hiciste sentir como un perro, e incluso estuve en prisión durante años en lugar de tu hija. Nunca podrás pagar por todos estos crímenes; nunca podrás compensarme. Es probable que, por el resto de tu vida, tu corazón nunca sufra por mí, solo amarás a Selene, tu otra hija”.

“¡Es por ​​eso, Lincoln Lynn, que te maldigo, te maldigo y espero que nadie te cuide cuando seas viejo! ¡Te maldigo que estarás solo y desamparado por el resto de tu vida! ¡Te maldigo! ¡Ya que nunca me reconociste como tu hija, no creas que te cuidaré cuando seas viejo y débil!”.

Después de una pausa, Sabrina dijo con rabia: "¡Tal vez Selene tampoco sea tu hija biológica! ¡Ja, ja!".

Tan pronto como terminó de hablar, miró a Jade, que estaba pálida de la conmoción, entonces abrió la boca para decir: "Tú... ¡Basta de tonterías!".