Castigado por su amor romance Capítulo 1254

Sabrina estaba atónita. Después, miró a Sebastian.

Sebastian le devolvió la mirada. “¿Es él otra vez?”.

“¿Es mi Tío Holden?”, preguntó Aino. Todavía tenía lágrimas en los ojos. Era una niña inteligente. Ya se había dado cuenta de la mitad del asunto con solo escuchar las conversaciones recientes. Para decirlo sin rodeos, Aino ya había comprendido casi todo en su mente. De lo contrario, no habría interrogado a su abuelo en la antigua residencia Ford.

“El Tío Holden es tan lamentable”. Aino de repente lloró con gran pena. “Él era el que más me amaba. Incluso me dejaba montar en su espalda. El Tío Holden no ha tenido el amor de su padre desde joven, ¿acaso su madre no lo quiere tampoco? Él es demasiado lamentable…”.

Sabrina no sabía qué decir. En el otro extremo de la línea, el tono del hombre de repente se volvió muy miserable. “¿Aino está llorando?”.

Sabrina respondió: “Holden Payne. ¿Eres Holden? Si lo eres, déjame decirte esto, Sebastian… mi esposo… bueno, tu hermano… te ha estado buscando”.

Hubo un largo silencio al otro lado de la línea. Después de un largo rato, se escuchó un resopló de desánimo. “¡No soy nadie! Soy el demonio despiadado que asesina sin siquiera pestañear. Conocí a un asesino aún más despiadado que me mató, así que ya no existo en este mundo. En cuanto a tu persona con el apellido Payne, ¿quién demonios es ese?”.

Sin embargo, ¿y su hermano gemelo menor? No tenía nada. El lugar del que dependía, la Isla Estrella, también había sido tomado por Sebastian. El hermano menor de Sebastian no tenía un lugar al que llamar hogar y estaba huyendo. Esta era la razón por la que Sebastian no podía ponerle la mano encima a su propio hermano menor. Sin embargo, eso también tenía límites.

Si él fuera su rival en el amor, ¡entonces sería una historia totalmente diferente! A este rival no solo le gustaba Sabrina, sino que también quería quitarle a Sebastian su amada Aino. Esto era lo que hacía a Sebastian el más despiadado y feroz de este corazón. Sebastian solo puso una cara larga y no dijo nada en absoluto.

Sabrina se dio cuenta de que el hombre estaba muy molesto. Por lo tanto, no dijo nada. En el camino de regreso, la familia de tres no dijo una palabra.