Castigado por su amor romance Capítulo 1305

Sabrina no dijo nada.

No quería contestar la llamada de Marcus, pero mientras hacía su rutina nocturna de cuidado de la piel, colocó su teléfono en la parte superior del cajón de la mesita de noche. Su esposo, ya acostado en la cama, vio la llamada entrante y respondió de inmediato, luego colocó el teléfono junto a su oído.

Sabrina se dio vuelta y miró a su esposo. Tenía miedo de que él se pusiera celoso. Cuando estaba celoso, ella sufría. Durante toda la tarde ya había sido atormentada por él en su oficina. Apenas habían pasado algunas horas desde entonces. Ella tembló al pensar en ello, pero sabía lo fuerte que él era. En media hora él podía recuperar su fuerza.

“Em… Primo Marcus… Ya son más de las once de la noche. ¿Por qué llamas tan tarde?”, preguntó Sabrina.

Del otro lado, Marcus sonrió irónicamente y dijo: “Estuve acompañando a mi Abuelo en su habitación. Cuando está despierto, no puedo dejarlo. Cuando se durmió, aproveché la oportunidad y me fui”.

En realidad, Marcus no había sido honesto con ella. Mientras acompañaba a su Abuelo, sin importar si el anciano estaba dormido o no; él podía salir de la habitación por un segundo para hacer una llamada telefónica.

Sin embargo, esta noche, Lori Gibson y su madre, Jennie Gibson, habían visitado a su Abuelo y trajeron consigo a una niña. Las hierbas que dejó debajo de la almohada de su Abuelo habían conmovido a toda la familia Shaw.

Especialmente al anciano. Después de todo, él mismo fue quien crió a Jennie, y la amó como si fuera su hija. Por eso se acercó a ella en un corto período de tiempo.

Esa noche, tanto Jennie como su hija Lori estuvieron al lado del anciano, hablándole con ternura sobre los hechos del pasado y contándole algunos chistes.

El anciano, quien estaba mal de salud, comió hasta medio muslo de pollo, e incluso bebió leche y comió una ensalada. Parecía mucho más animado.

Al ver al anciano animado, Marcus y sus padres se sintieron cada vez más agradecidos con el dúo de madre e hija. Después de la cena, ambas decidieron acompañar al anciano para conversar con él, por lo que el padre de Marcus estuvo de acuerdo. Sin embargo, ya eran pasadas las 10 de la noche, y Jennie y su hija ni siquiera habían mencionado irse.

"Está bien, está bien, rápido, vete a casa ahora, niña", dijo el Viejo Amo Shaw felizmente. Entonces la madre, la hija y la niña abandonaron la residencia de la familia Shaw.

De hecho, Marcus se mostró bastante molesto debido a su presencia. En ese momento, aún no había llamado a Sabrina, no sabía qué le había pasado. Ante ese pensamiento, sacó su teléfono y marcó su número. Solo quería saber qué pasó.

Sin embargo, Sabrina había respondido la llamada durante casi un minuto, pero aún no respondía a su pregunta.

“Sabbie, Sabbie, ¿me estás escuchando? ¿Estás enojada conmigo por lo que pasó esta mañana? Por favor, escucha mi explicación…”. Marcus le hablaba a Sabrina.

Sin embargo, por su parte, Sabrina, quien estaba sostenida en los brazos de Sebastian contra su voluntad, accidentalmente dejó escapar un suave grito. “Ah…”.