Castigado por su amor romance Capítulo 1424

Sabrina preguntó: “Señor Ford, te lo voy a preguntar una vez más. ¿Está Holden en el cementerio de mi suegra?”.

Sean respondió: “¡Bah! Sabrina, ¿cómo puedes hablarme así? ¡Sí! ¡Me equivoqué contigo! ¡Sin embargo, sigo siendo tu suegro!”.

Sabrina dijo: "Señor Ford...".

Sean interrumpió a Sabrina: “Dame una razón. Dime, ¿cómo sería posible que Holden viniera a la tumba de Grace? ¿Por qué querría venir a su tumba? ¿Qué secreto me estás ocultando?”.

Sabrina se quedó sin palabras. Entre más escuchaba a Sean hablar con ese tono, más sentía que él estaba encubriendo la verdad. Sin embargo, mantuvo la compostura y dijo: "Entiendo. Tampoco debes quedarte allí por mucho tiempo. Es fácil resfriarse en las lluvias de finales de otoño”.

Sean dijo: "¡Voy a colgar!".

Después de colgar la llamada, Sean miró a Rose. "¿Por qué no me dejaste decirle a Sabrina?".

Rose miró a Holden. "Míralo. ¿Entiendes lo que él está diciendo? Dice que no tiene hogar. Dice que el mundo es tan grande y, sin embargo, no hay ningún lugar al que pueda llamar hogar. Dice que Isla Estrella le pertenece a la familia Payne, pero ¿qué hay de Ciudad del Sur? Le pertenece a su hermano gemelo mayor. ¿Qué hay de él? ¿Qué tiene él? Todo lo que ha tenido es humillación”.

Al escuchar a Rose repetir las palabras del borracho de Holden, Sean miró a Rose con irritación. “Estás repitiendo sus palabras. Efectivamente, esta es su situación actual, ¡y tal vez ese sea su destino!”.

Sin embargo, Sean nunca esperó lo que Rose diría a continuación. “Deja que Holden sea mi hijo, Sean”.

Sean estaba muy sorprendido. “¿De qué tonterías estás hablando? Este chico te ha golpeado con todas sus fuerzas cada vez, ¿y aun así quieres considerarlo como tu hijo?”.

Rose dijo: “Necesito a alguien en quien confiar. Ya soy vieja ¿En quién puedo confiar? ¿Sebastian? Él no me ha golpeado como este chico, pero ¿cuándo me ha tratado bien? Tus padres dependen de ti. También tienen a Sebastian y Aino. Pero, ¿y yo? Sean, ¿te has dado cuenta de que, en esta antigua residencia, desde que Sebastian y Sabrina regresaron, no soy más que una extraña?”.

Sean se quedó sin palabras. Rose tenía razón.