Castigado por su amor romance Capítulo 1454

Gloria dijo con calma: “Genial. Está bien si no me quieren aquí”.

Al decir eso, dejó la utilería en su mano y abandonó el lugar. La entrenadora de baile se quedó sin palabras. ¿Acaso dijo algo malo? Solo pensaba que el anciano de noventa años, quien estaba sentado en la silla de ruedas, era deprimente. Si su padre estaba dispuesto a hacer las paces de esa manera, entonces, ¿cómo podría la hija ser tan cruel?

¡No era de extrañar! ¡Tenía sentido que la hija de la Señora Gibson viniera a pelear hace un rato! La mujer estaba tan enojada que no dejaba de quejarse a espaldas de Gloria.

“Antes de juzgar a una persona, ponte en sus zapatos”. Una voz suave se podía escuchar detrás de la mujer. Se dio la vuelta para echar un vistazo, e inmediatamente preguntó desconcertada: “Viejo Amo Shaw, su hija nunca lo ha aceptado. Lo he visto mirándola desde lejos todos los días, sin siquiera decir una palabra. Usted realmente me dio lástima. Lo estoy defendiendo, ¿pero en vez de eso se pone en mi contra?”.

El Viejo Amo Shaw suspiró con calma. "Dime, hija mía, ¿has vivido con tus padres desde pequeña?".

La mujer asintió. “Sí, Viejo Amo Shaw. ¿Qué niño no estaría al lado de sus padres desde una edad temprana?”.

Al escuchar a la mujer decir eso, el anciano dijo con una expresión de culpa: "¿Qué pasa si tu padre no te reconoce desde el día en que naciste e incluso te insulta cuando te ve?".

La mujer frunció el ceño. "¿Qué? ¿Existe tal padre en este mundo?”.

“No solo te insulta, sino que tu padre incluso acogió a la hija de otra persona y la trató como a una princesa. Le dio todas las cosas buenas a la otra niña, tanto que esa otra niña se atrevió a hostigar a su hija biológica. La otra niña incluso instigó a las sirvientas de la casa para que echaran a la niña biológica. Si fueras tú, ¿qué harías?”.

La mujer lo reprendió con enojo e irritación: "¡De hecho, es su culpa!".

“No culpes a mi hija, ¿de acuerdo? No la eches ni le pidas que deje el grupo de baile. Estuvo vagando de un lugar a otro toda su vida. No fue fácil para ella finalmente encontrar un pasatiempo a esta edad, y también tener una buena relación con todos ustedes. Solo espero que ella pueda ser feliz”.

La mujer aseveró: “¡Por ​​supuesto! ¡Aunque no me pidiera que lo hiciera, iré a pedirle que regrese, y también me disculparé con ella mañana!”.

La mujer realmente cumplió su palabra. Temprano en la mañana del día siguiente, fue a casa de Gloria y se disculpó sinceramente con ella. “Gloria, soy una m*ldita. Solo vi un lado de la historia, y no sabía que habías sufrido tanto desde pequeña. Me equivoqué ayer. Gloria, ¿me perdonas?”.