Castigado por su amor romance Capítulo 1635

Todos hablaron sobre su vida diaria, compañías y tendencias de desarrollo.

Sabrina y algunas sirvientas estaban ocupadas en la cocina. Sabrina ya tenía cinco meses de embarazo ahora, por lo tanto las complicaciones de su embarazo se redujeron un poco. Podía moverse y ayudar un poco.

El corazón de Sabrina se conmovió cuando vio que la cocina estaba llena y que la sala de estar estaba tan animada. Cuando Sabrina vio que a Zayn le gustaba una chica, sintió como si le hubieran quitado un gran peso del pecho. Zayn era su familia, así como su madre, Aino y Sebastian lo eran. La felicidad de Zayn era muy importante para Sabrina.

Mientras estaba ocupada ayudando en la cocina, Sabrina no pudo evitar preguntarles a las sirvientas en casa.

“Tía Tianna, ¿qué piensas de Tessa?”.

La Tía Tianna sonrió. "¡Creo que la joven puede ser la esposa del tío de Aino!".

La Tía Lewis también sonrió. “En la actualidad, ya no hay muchas chicas que sean tan sensatas a una edad tan temprana. Sin embargo, creo que, aunque la Señorita Payne no es tan bonita, es una persona muy responsable y cada vez luce mejor. Parece muy tranquila”.

Sabrina asintió de inmediato. "Sí, ambas son buenas chicas". Cuando miraba a Tessa y Minerva, no pudo evitar suspirar. “Realmente me siento muy aliviada de saber que ambos tienen chicas que les gustan. De lo contrario, siempre sentiría una pena en mi corazón. Ahora, ya puedo estar tranquila”.

Los cuatro invitados cenaron en casa de Sabrina esa noche. Durante la cena, Nigel se dio vuelta hacia Sebastian. “Sebastian, cuando estés libre, lleva a Sabrina y Aino a visitar a mi abuela. Ella es una buena persona, pero cada vez pierde más el sentido. ¿Quién sabe cuánto tiempo le queda de vida? Si no quieres tener ninguna interacción con mi tío y mi tía, aun así, tienes que venir a visitar a la abuela”. Nigel sonaba sincero.

Sebastian solo sonrió y dijo con calma: “¡Mocoso! Cada vez eres más sensato y cariñoso. Iré solo debido a tu sinceridad. No he llevado a Sabrina y Aino a la residencia de Ford porque Sabrina tenía riesgo de complicaciones en el embarazo. Ahora que ella está más avanzada y el riesgo es mucho menor, en algún momento las llevaré de vuelta a los dos”.

"Gracias, Sebastian", dijo Nigel con una sonrisa.

"¡Comamos!", dijo Sebastian.

"¡Buah!". Ella frunció los labios y miró a sus padres.

“¿Qué te pasa, niñita? La casa estaba tan animada con algunos invitados, y también vino tu Señorita Minerva. Entonces, ¿por qué estás molesta?”, preguntó Sabrina pacientemente.

“Nunca dije que no me agradara la Señorita Minerva. Ella es tan linda. Me gustan las pequeñas pecas en su cara. También me gustan sus ojos pequeños y su nariz aplastada. Siento que la Señorita Minerva es la mujer más bonita”.

Sabrina y Sebastian se quedaron sin palabras. La pareja sospechaba seriamente que había un problema con los estándares estéticos de su hija.

Sin esperar a que sus padres dijeran nada, Aino rugió enojada: "¡Le prohíbo a mi tío salir con Tessa!".