Resumo do capítulo Capítulo 1684 do livro Castigado por su amor de Internet
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El corazón de la vieja se desvaneció al escuchar esas palabras. ¡Ellos habían sido una pareja casada durante diez años! ¡Había cocinado para él durante diez años! Él estaba tan bien nutrido bajo su cuidado. Ella solo le había pedido la matrícula de su nieto ese año, y fue porque ella ya no tenía como salir a trabajar. Al final, él no le dio ni un centavo. Además de que se negó a dársela, incluso la golpeó. También la maldijo. Además, la echó al patio del alojamiento para miembros de la facultad, bajo la mirada de muchos profesores jubilados y demás.
“Todos ustedes vengan y juzguen. ¿Es esta mujer un parásito? ¡Yo crié a su nieto desde que era un bebé! Ella no es miembro de la facultad, pero pudo quedarse aquí. No tenía un trabajo oficial ni pensión, ¡pero pudo mantener y criar a su nieto! Lo he criado durante diez años. ¿Cuándo terminará?". El anciano estaba tan exaltado que no podía respirar.
Toda la gente en el patio criticó a la vieja. "¡Eres increíble!".
"¡Gente como tú ha absorbido los recursos del anciano hasta que sus huesos se han secado!".
“La gente del área rural no puede ser tomada como novia. ¡Ella no tiene seguridad de sustento, por lo tanto puede agotar por completo tu salario!”.
"Neo, ¿por qué no encontraste a una mujer que también fuera maestro como tú en ese entonces?".
El grupo de personas tenía diversas opiniones. Justo cuando seguían conversando, algunos hijos del anciano regresaron. Cuando vieron al anciano tan enojado, juzgaron a la vieja como si se hubieran vuelto locos.
“¡Señora Cecilia! ¿Es así como cuidas a mi padre?”.
Al escuchar a la vieja decir eso, el anciano se puso aún más furioso. “¡M*ldita vieja! ¡Realmente eres un parásito! ¿Estás siendo razonable? ¡Eres una persona sin sueldo! ¡Me he hecho cargo de todos tus gastos de manutención! ¡Ese es mi dinero! ¿Quién me puede impedir dar mi dinero a mis nietos y mis hijos? ¿Por qué debería dárselo a tu nieto? ¡Ya no voy a ajustar cuentas contigo sobre el pasado! ¡Voy a establecer las reglas para ti ahora! ¡Ahora te quedas en mi casa! ¡Estás comiendo mi comida y usando mi ropa! ¡Estás bajo mi control! Entonces, solo puedes interactuar con mi familia. En cuanto a tu familia, ¡olvídalo! No voy a permitir tu mal hábito. ¡Cuanto más lo permita, más arrogante serás! ¡Levántate! ¡Ve a cocinar para mí ahora!”. El anciano regañó a la vieja frente a mucha gente.
La vieja estaba desconsolada. La gente solía decir que era muy difícil para las parejas en sus segundos matrimonios estar de acuerdo, y eso era cierto. Después de estar casada durante tantos años, ella había estado viviendo miserablemente, pero ¿y su esposo? Aunque era más de una década mayor que ella, él se veía más radiante que ella. Él era un miembro de la facultad después de todo. Para una persona con una pensión era muy diferente.
La vieja se levantó y en silencio entró a la casa a cocinar. Esa noche, ella cocinó para toda la familia, pero su nieto no probó ni un solo bocado. Muchas personas la criticaban.
"Neo, la esposa del segundo matrimonio no se puede comparar con la primera".
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