Castigado por su amor romance Capítulo 1825

"Te cuento esto para decirte que tu marido, que vivió una vida dura en el exilio, en realidad ya tenía un club de lo que era lo contrario a las armas blancas cuando tenía dieciocho años. Era un club de armas de fuego y explosivos. ¡Ese era su club privado! Ya que sabes de armas blancas, entonces también deberías saber de armas de fuego y explosivos, ¿no?". El tono de Holden tenía una especie de pena incomparable.

En ese momento, aquel gran barco con un fuerte ruido se acercaba cada vez más, pero tanto a Holden como a Sabrina no les importaba lo más mínimo. No importaba si el barco se acercaba porque Sabrina podría saltar al mar en el siguiente segundo de todos modos. En cuanto a las armas de fuego y los explosivos que Holden había mencionado, como Sabrina y Sebastian llevaban casi dos años de matrimonio y ella también había estado a su lado durante un tiempo hace siete años, era natural que supiera lo que eran las armas de fuego y los explosivos.

Sabrina no dijo nada. Se limitó a mirar a Holden. En ese momento, volvió a sentir lástima por Holden. La expresión de su rostro era incomparablemente apenada, anhelante, envidiosa y también celosa.

"Cuando yo también tenía dieciocho años, entré en la universidad, pero mis padres no querían dejarme asistir. Incluso me maldijeron con todas las palabras sucias. Cuando también tenía dieciocho años, mi padre pensaba en hacerme básicamente un hombre castrado siempre, sin tener mi propio hijo en el futuro. Eso era porque decía que yo era un engendro del diablo y un b*stardo. Mi madre me pellizcaba todo el día hasta que estaba siempre cubierto de moratones. Si hubiera ido un poco en contra de sus deseos, mi madre me haría arrodillar sobre fragmentos de vidrio. Sin embargo, ¿y cuando tu marido tenía dieciocho años? Él tenía a su madre acompañándolo. Tenía una gran suma de dinero de manutención de su padre. Estudiaba en la mejor universidad, y tenía suficiente dinero para construir sus recursos. A los dieciocho años, a pesar de ser un hijo ilegítimo de la familia Ford que vivía en el exilio, ya se había ganado la vida silenciosamente. Al mismo tiempo, ¡también consiguió hacerse amigo de Alex y de esos otros hermanos de sangre suyos! Desde entonces, él formó su círculo de amigos".

Continuó: "Fue porque él era lo suficientemente poderoso en ese momento, que Malvolio, quien se había visto en un callejón sin salida después de ser despiadadamente expulsado por Alex, no tuvo otra opción que huir al extranjero. Malvolio pensó en un principio que podría emprender un negocio en el extranjero con los ahorros conseguidos tras años de robos, pero nunca esperó que Alex lo siguiera al extranjero y quisiera castigarlo severamente. Sin embargo, Malvolio tampoco era una persona fácil de tratar. Malvolio, quien se desesperó después de ser perseguido implacablemente por Alex, simplemente se lanzó a luchar contra Alex hasta la muerte, y realmente casi lo mata a golpes. En ese momento crucial cuando Malvolio pensaba que podría ganar, se encontró con Sebastian en su lugar. En ese momento, Sebastian aún no conocía a Alex, pero optó por salvarle la vida. Ayudó a Alex a enfrentarse a Malvolio y casi lo mató. Más tarde, Malvolio solo consiguió escapar después de fingir que estaba muerto. Después de eso, se subió a un viejo barco de carga averiado y huyó a Falaos. Entonces empezó a vivir su vida a la fuga. Sin embargo, nadie esperaba que Malvolio hiciera una fortuna en Falaos".

Mientras decía eso, el gran barco también había llegado ya cerca del barco de Holden. Holden, Sabrina y también algunos asistentes del barco podían sentir que la gente subía a su barco continuamente. Sabrina ni siquiera levantó la cabeza para echar un vistazo. Se limitó a mirarlo con desprecio. "Holden, no importa lo que hayas dicho, ¡esa persona llamada Malvolio sigue siendo un ladrón que ha hecho todo tipo de maldades! Aunque no me lo digas, ¡también sé cómo tú hiciste una fortuna en Falaos! Realmente no entiendo por qué me cuentas tanto sobre su pasado. ¿Intentas ayudarlo a blanquear sus acciones? Él está aquí para acabar contigo, ¿y tú sigues blanqueando sus acciones? ¡Holden, realmente eres extraño!".

Después de decir eso, Sabrina se levantó de repente. No le importó que tuviera una enorme barriga de embarazada. Simplemente corrió imprudentemente hacia la proa del barco. Como ya se había convertido en prisionera de otra persona, entonces podía sufrir una humillación menor si moría antes. Eso era porque Sabrina podía saber, por lo que había oído, que esa persona llamada Malvolio era el archienemigo de su marido.

Justo en ese momento, su teléfono sonó. De hecho, su teléfono no sonó, sino que su llamada a Sebastian había seguido conectada todo este tiempo. La llamada nunca había terminado. En ese momento, una voz aguda de una niña salió de repente de su teléfono. "¡Mamá! Es Aino. Mamá, no te mueras". Aino sollozaba.