Castigado por su amor romance Capítulo 1828

Sabrina se sujetó el vientre embarazado y miró a Malvolio sin el menor temor. "¡Puedes matarme de la manera que quieras!".

Malvolio se quedó sin palabras. Al ver que no decía nada, Sabrina continuó tranquilamente: "Ya ves que estoy embarazada, ¿verdad? Así es. Es el hijo de Sebastian. Si me mataras ahora, equivaldría a matar dos vidas a la vez, así que date prisa. Qué oferta es para ti en este momento, ¿verdad? ¡Vamos! Apuñálame en el vientre con un cuchillo. Deja que muera antes para que yo también esté tranquila".

Sabrina era una persona de mente muy abierta. Sabía que ciertamente no iba a poder salir viva de esto, puesto que ya había caído en manos de Malvolio, así que prefería tener un final sencillo. Entonces sonrió y miró a Malvolio con calma. Malvolio se quedó atónito por un momento.

Apuntó a Sabrina con la pistola que tenía en la mano y luego se rio suavemente. "Si... solo digo si, si no te desprecio por ser una mujer embarazada, ¿serías mi esclava sexual?”.

"¡Malvolio Yeatman! ¡Vete a la m*erda tú y tu abuela!". Holden se levantó de repente, dio un pisotón con ambos pies y pateó directamente a Malvolio.

Si Malvolio y Holden se enfrentaran, Malvolio no podría vencer a Holden. Al fin y al cabo, Holden también era despiadado. Solo que no pasaba a la acción; si lo hiciera, su oponente moriría con toda seguridad. Sin embargo, Holden no tenía un arma. Antes de que pudiera patear a Malvolio, su pierna fue disparada y rota por Malvolio.

"¡Ay!". Holden cayó directamente al suelo y se revolcó de dolor. Rodó hacia el frente de Malvolio, luego abrazó repentinamente las piernas de Malvolio con ambos brazos. Después de eso, le gritó a Sabrina con todas sus fuerzas: "¡Sabrina! ¡Apresúrate y corre! ¡Corre! ¡Salta al mar! Puedes tener una oportunidad de vivir si saltas al mar. Corre rápido...".

"¡No te preocupes!". La voz condescendiente de Malvolio llegó desde arriba de ellos. "No dejaré morir fácilmente a Holden", dijo Malvolio.

Tras decir eso, Malvolio le dio una patada a Holden, quien estaba acurrucado en el suelo. "Holden, solo puedes culparte a ti mismo. Tú y tu hermano gemelo, Sebastian Ford, son tan despiadados y sin corazón. Si tuviera que enfrentarme a ustedes, tal vez no pudiera. Sin embargo, no tienes la m*ldita mente para lidiar conmigo en absoluto. Tu mente estaba totalmente ocupada con el robo de la esposa de tu propio hermano. ¡Pones toda tu mente en destruir la familia de tu hermano! ¡Ajá! ¡Yo, Malvolio Yeatman, me había conseguido una ganga! Sin embargo, ya que has caído en mis manos, entonces lo siento, ¡no puedo prescindir de ti fácilmente! ¡Tengo que usarte! Tengo que usar a Sabrina tu cuñada. Tengo que usarlos a ambos para que Sebastian sufra un golpe agresivo. Holden Payne, ¿adivina cómo me vería toda Ciudad del Sur cuando cuelgue las cabezas tuya y de Sebastian en la antigua puerta de Ciudad del Sur?".

Pensando en eso, Malvolio dijo inmediatamente con orgullo: "Cuando llegue ese momento, seguro que me tratarán respetuosamente como a un rey o un dios, ¿verdad? Me emociono incomparablemente cuando pienso en ese escenario. Si...".