Castigado por su amor romance Capítulo 1869

Cuando Kingston mencionó eso, Aino de repente lloró. Ella contuvo sus lágrimas y levantó su cabeza para mirar a Kingston. "Tío Kingston, yo… no me atrevía a llorar frente a mi papá todo este tiempo porque tenía miedo de que él estuviera triste. Dime, Tío Kingston, ¿podrán mi mamá… y mi hermano menor volver?".

Cuando escuchó a Aino preguntar tal pregunta, Kingston instantáneamente estalló en lágrimas. Tenía un nudo en la garganta, y no pudo hablar por un buen tiempo. Él se tomó un largo tiempo para calmarse. "¡Sí, ellos pueden! ¡Tu madre ciertamente podrá volver! ¿Quién es ella? En aquel momento, el padre biológico de tu madre la había secuestrado durante seis años. Su situación era peor que ahora. Sin embargo, ¡tu madre aún así fue capaz de regresar viva! ¡Tu madre es la mujer más dura con la más fuerte habilidad de sobrevivir que jamás haya visto en este mundo! ¡Ella ciertamente estará bien!".

Aino sonrió y miró a Kingston. "¿En serio, Tío Kingston?".

"¡Créeme!", dijo Kingston seriamente. Después de decir eso, agregó: "Nunca te he mentido, ¿verdad?".

Finalmente, Aino asintió en alivio. "Sí, nunca me has mentido. ¡Mi madre y también mi hermano menor definitivamente regresarán!". Esta pequeña niña sonrió y miró a Kingston. "Tío Kingston, regresemos. Todavía tengo que ver a mi papá montar un espectáculo más tarde".

"Está bien". Kingston ayudó a Aino a ponerse el cinturón de seguridad. Cuando arrancó el coche, vio al camión de basura viniendo, y luego había incluso dos trabajadores siguiendo el camión a su lado. Kingston pensó que esa mujer iba a ser salvada. Por lo tanto, conducía sin mirar atrás.

Mientras tanto, como Kingston lo esperaba, después de Maysun, quien todavía estaba en la alcantarilla luchando por un tiempo, un camión de basura se detuvo frente a ella. El camión de basura estaba muy maloliente. Todos los trabajadores estaban usando equipo de protección. Cuando los pocos hombres vieron a la persona estancada en la alcantarilla, el conductor y también dos trabajadores estaban todos aturdidos.

Ellos podían darse cuenta de un vistazo que la persona frente a ellos era una mujer porque su ropa estaba completamente empapada por lo que se veía su figura curva. Sin embargo, esta mujer estaba cubierta de basura y materia fecal de la cabeza a los pies. Ella incluso tenía algunas criaturas vivientes trepando en su cuello. ¡Dios mío! Esos basureros nunca habían visto a una persona cubierta de basura antes. Ella estaba absolutamente empapada de olores que iban más allá de lo acre.