Castigado por su amor romance Capítulo 1945

“Bueno… tú hueles”. Sebastian arrastró sus palabras.

Maysun quedó atónita.

“Normalmente, realmente hay muy… pocas mujeres que aún… se atreverían a aparecer en frente de mí cuando huelen, ninguna en absoluto”.

Al decir eso, Sebastian vomitó dos veces, y luego continuó: “Entre todas las mujeres que he visto, todas han estado arregladas. Sus perfumes son lo suficientemente fuertes para hacer picar la nariz de otros. Sin embargo, tú… tú…”. Sebastian miró a Maysun con ojos bastante desenfocados. “Tú… tú eres diferente. Tú eres completamente opuesta a esas mujeres… El hedor que tienes… es suficiente para apestar hacía diez kilómetros de distancia si te pones de pie contra el viento”.

Maysun no tenía palabras. En ese momento, ella quería llorar. ¡Oh! ¡Este m*ldito hombre! Era increíblemente incómodo, pero no tenía más opción que aguantar y seguir escuchando.

“Tú eres la… única en este mundo… quien se atreve a… aparecer ante mí cuando tienes un hedor”.

La sonrisa de Maysun se veía peor que llorar. ¿Aún podría ser esto algo especial sobre ella? ¿Debería sentirse feliz?

No era difícil para Maysun entender. Como Sabrina ya había estado embarazada con la hija de Sebastian en el pasado, Sebastian tuvo que agotar todas las maneras posibles para encontrar a Sabrina y casarse con ella. Solo había una razón por lo que Sebastian hizo todo eso, lo cual era estabilizar el corazón entero del Grupo Ford. Porque ya sea que el matrimonio de la persona con la máxima autoridad en un grupo de compañías sea estable o no, podría afectar directamente a muchos grandes proyectos de colaboración del grupo. Si la persona con la máxima autoridad en un grupo de compañías no trataba su matrimonio como un juego de niños, tenía un matrimonio estable y un manierismo decente, entonces establecería una imagen positiva para todo el grupo. Por lo tanto, Maysun finalmente entendió que lo que Sebastian y Sabrina tenían entre ellos era, de hecho, solamente un trato. ¡Solo era un trato! ¡Ja, ja!

“Amo Sebastian, déjame ayudarte ir hacia una habitación a descansar”. Maysun finalmente se sintió cómoda para acercarse a Sebastian.

Sebastian la empujó lejos. “Vete. ¡Apestas!”.