Castigado por su amor romance Capítulo 2153

La manera en que ella se veía era extremadamente tierna en los ojos de Vireo. Era tan conmovedor y le dio muchas ganas de apretarla con fuerza entre sus brazos.

“¿Tienes hambre?”, preguntó el hombre suavemente.

“Mmm”. Isadora realmente tenía hambre. Cuando estaba en el restaurante, estaba tan enfocada en escuchar a Vireo hablar de su pasado que no comió mucho en absoluto. Encima de eso, le tomó más de una hora ordenar todas las cosas en las habitaciones después de haber entrado a la casa, así que realmente tenía un poco de hambre.

“Vamos, te llevaré a lavarte la cara. Después de eso, puedes sentarte y ver televisión en la sala de estar a esperarme. Terminaré de cocinar en media hora”. El hombre guió a Isadora hacia el baño. No podía soportar no limpiar su carita sucia, pero sabía que Isadora sería tímida.

Como era de esperar, cuando Isadora se vio en el espejo, primero bajó la cabeza tímidamente, luego se inclinó riéndose y se movió en sus brazos. Sus movimientos encendieron instantáneamente el deseo ardiente dentro de Vireo, pero no podía actuar demasiado precipitadamente. Tenía miedo de asustar a Isadora.

Después de lavar y limpiar personalmente la cara de Isadora, él la llevó a la sala de estar nuevamente antes de ir a la cocina. La cocina estaba hecha un gran desastre, pero pudo limpiarla muy rápido. Isadora arruinó casi todos los ingredientes en el refrigerador, pero aún quedaba más o menos un poco. Mientras todavía hubiera algunos ingredientes, entonces no estaría preocupado de que no tuvieran nada para comer.

Cocinar era algo fácil y familiar para Vireo. Podía hacer todo tipo de comida casera. Mientras él estaba ocupado en la cocina, Isadora no podía quedarse quieta en la sala de estar. Entonces fue de puntillas a la cocina. Cuando se paró en la puerta de la cocina y miró al hombre con delantal manejando hábilmente todo en la cocina, Isadora sintió que eso era una especie de disfrute. La espalda del hombre era delgada pero también parecía ser ancha y poderosa.

Abrazó a Vireo de atrás, y luego presionó su rostro contra su espalda. “Holden…”, susurró ella.

El hombre dijo suavemente: “¿Mmm? ¿Tienes hambre? Acabaré pronto. Solo espera un minuto”.

“Holden, te… te amo”, dijo Isadora.

Vireo no tenía palabras.