Castigado por su amor romance Capítulo 2266

“Tío Holden, ¡debes ser Tío Holden!”, dijo el hombre de manera directa mientras sonreía.

Vireo estaba confundido. “Considerando tu edad, deberías ser…”.

“Te estoy llamando tío por tu edad y tu posición en la familia”, dijo el hombre con una sonrisa.

Vireo no tenía palabras.

“Es así, Tío Holden, necesito explicarte esto. Mi Tío Alex y su hermano, quien es mi Tío Sebastian, son hermanos de sangre. Su relación es tan buena que ambos están dispuestos a sacrificarse por el uno y el otro. Te contaré un secreto. En ese entonces cuando el Tío Alex y el Tío Sebastian eran muy pobres, una vez compartieron los mismos pantalones. Por lo tanto, su relación no es muy diferente a tu relación con el Tío Sebastian. Bueno, ya que me refiero a Sebastian como mi tío, no lo puedo estar llamando como un amigo ahora, ¿puedo? Tío Sebastian me pelaría vivo de esa manera”. Ryan ya era el padre de dos hijos, pero él todavía era como un niño frente a Sebastian, Vireo, y todas esas personas.

Vireo todavía estaba confundido. “Tu nombre es…”.

“Ah, Tío Holden, ¿podrías primero dejarme entrar? Extraño a mi esposa, y extraño más a mis dos hijos”. Ryan impacientemente quería apretarse a través para entrar.

“¡No entres! ¡Si te atreves a entrar, te mataré!”. De alguna manera, Ruth estaba parada detrás de Vireo.

No solo tenía un cuchillo de cocina en la mano, sino que también tenía dos guardaespaldas de aspecto feroz parados junto a ella. Sin embargo, sus dos guardaespaldas eran demasiado bajos. Ni siquiera llegaban a la cintura de Ruth. Si los dos guardaespaldas se pararan junto a Vireo y Ryan, quienes eran aún más altos, probablemente solo podrían llegar hasta sus rodillas. Sin embargo, a pesar de que eran bajos, ambos guardaespaldas eran luchadores duros. Sin esperar a que Ruth les diera la orden, ambos guardaespaldas ya cargaron contra Ryan con ira. Ambos niños pequeños abrazaron una de las piernas de Ryan cada uno.

“Eso es cierto, Tío Holden”. La manera en que Ryan se refería a Vireo era como si él realmente fuera su tío, pero Vireo todavía no lo conocía. Además, Ryan había escuchado que Vireo era muy gentil y también muy bien educado. Tal vez era la mejor persona que Ryan podía conseguir para ayudar a hablar bien de él ese día. Por lo tanto, Ryan tenía que ser un poco más amable con él.

“Date prisa y entra. Mira lo geniales que son tus hijos. Fuertes y adorables. Oh, son realmente muy fuertes”. Mientras Vireo los felicitaba, dio un paso atrás con la intención de dejar que Ryan entrara a la casa.

Tan pronto Vireo dijo eso, escuchó voces que decían al unísono: “¡De ninguna manera!”.

Una de ellas fue Ruth. Las otras dos voces fueron muy infantiles que salieron de la boca de los dos pequeños guardaespaldas que perseguían y atacaban a Ryan.