Resumo de Capítulo 234 – Castigado por su amor por Internet
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Selene se sintió extremadamente avergonzada en ese momento. Forzó una sonrisa y miró sarcásticamente a Sebastian: “Querido Sebastian, no importa, yo fui la mujer que una vez llevó a tu hijo y te salvó la vida. Además, mi abuelo es muy poderoso. ¿No soy lo suficientemente buena para ti?”
Sebastian dijo sin ninguna expresión: “No”.
Selene preguntó: “¿Por qué?”.
Sebastian respondió con un tono burlón: “Sabrina arruinó nuestro matrimonio. Nadie en Ciudad del Sur se atrevería a crear un alboroto en mi boda. Ya que Sabrina ha hecho tal cosa, entonces definitivamente la castigaré. Antes de capturar a Sabrina, no me casaré”.
Selene se quedó sin palabras.
Transmitió lo que le dijo Sebastian a Lincoln y Jade. La familia de tres especuló en privado que tal vez la razón por la que Sebastian quería capturar a Sabrina con vida no era para acabar con ella, sino que era por el niño que llevaba en su vientre.
Sebastian debía estar convencido, solo a medias, de las palabras de Sabrina.
Quería esperar a que Sabrina diera a luz al bebe. Si el bebe de Sabrina era de Sebastian, entonces la familia Lynn no podría escapar de la muerte.
Sin embargo, estas eran solo especulaciones.
Los subordinados que seguían a Sebastian han hecho correr la voz de que querían capturar a Sabrina viva.
Si Sabrina se resistía, la matarían en el acto.
Fue debido a la orden que la familia Lynn se convenció plenamente de la determinación de Sebastian de matar a Sabrina.
Fue también a partir de ese día que Lincoln y Jade contrataron con frecuencia a asesinos, que querían más al dinero que sus propias vidas, y les ordenaron cazar a Sabrina por todas partes.
Sin embargo, habían pasado seis años, y cada vez que preguntaban por Sabrina, la respuesta era que había escapado tras recibir la noticia.
El dinero gastado por Lincoln para pagar a los asesinos a sangre fría en estos seis años había ascendido a más de decenas de millones de dólares.
Nunca pudieron encontrar siquiera la sombra de Sabrina.
Sin embargo, Selene solo lo pensó y sintió en su corazón, y no se atrevió a hacerlo en la realidad.
Como Selene fue la que llegó en secreto al frente de la residencia de Sebastian, no podía golpear a Sabrina en el vestíbulo de su edificio, y Sebastian no debía saberlo.
Selene solo pudo reprimir temporalmente el odio en su corazón mientras pensaba en otra forma de aplastar a Sabrina.
En ese momento, Selene vio la forma en que Sabrina estaba distraída. Entonces dijo con suficiencia y arrogancia: “Sabrina, ¿estabas pensando en tu corazón que mi primo, Marcus, también era uno de tus admiradores hace seis años?”.
“¡Ja, ja!”.
“¿Lo sabías? Mi abuelo casi se muere de rabia por los asuntos entre tú y mi primo. Si te presentas ante mi abuelo, ¿adivina qué te haría?”.
Sabrina dijo: “Selene, por muy grande que sea ese abuelo tuyo, ¿tiene algo que ver conmigo? Yo no me he metido con tu primo. Entonces, ¿qué podría hacerme tu abuelo? Por muy poderoso que sea, no infringiría la ley solo para castigarme, ¿verdad?”.
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