Castigado por su amor romance Capítulo 2561

Kingston no podía imaginar cómo se sentía que una madre no amara a sus propios hijos.

Inconscientemente, Kingston levantó el brazo y lo puso alrededor de la chica. No tenía la intención de hacerle nada indecente. Era solo una reacción natural para él. Quería consolarla y darle fuerzas.

La chica tampoco se opuso. Quizás estaba demasiado cansada y emocionalmente agotada. Se sentía muy agraviada, por lo tanto lloró a mares en los brazos de Kingston.

"¿Sabes lo inferiores que hemos sido tanto mi hermano como yo después de que nuestros primos se rieron de nosotros? ¡No tienes idea! Mi madre no solo fue muy dura con mi hermano y conmigo en lo que respecta a la comida y siguió satisfaciendo a su familia, sino que también involucró la ropa. Ya teníamos un presupuesto muy ajustado para la ropa y, para empezar, no nos quedaba mucho dinero después de un año. Mi padre originalmente quería comprar ropa nueva para mi hermano y para mí, pero mi madre tomó el dinero destinado a nuestra ropa nueva y se lo dio a mis abuelos", lloró ella.

"Al final, tanto mi hermano como yo no teníamos ropa nueva para usar en el año nuevo. Cuando todos nuestros familiares se reunieron, todos nuestros primos estaban vestidos con ropa fresca y nueva. Mi hermano y yo éramos las únicas excepciones. Nos paramos en medio de ellos como pequeños tontos. ¿Sabes lo inferiores que nos sentimos los dos? Mi hermano se sentía tan inferior que se cubrió los ojos y lloró. Cuando crecí un poco, me sentí insatisfecha. Luego agarré un puñado de tierra y lo arrojé sobre la bonita chaqueta de esquí de mi prima, y mis tías y mi madre me vieron haciendo eso. Mis tías me regañaron por ser maliciosa. Me regañaron por ser tan malvada como mi padre. Mi madre incluso estaba tan enojada que me golpeó tanto que sangraba por los oídos. Me golpeó en la casa de mi abuela y continuó después de que llegamos a casa. Mientras me golpeaba, ella me maldecía. Dijo que yo era una inútil. Dijo que era tan inferior y malévola como mi padre. Dijo que yo era diferente a ella, quien era desinteresada, abierta, e injusta. Ella preguntó cómo pudo tener una familia de personas codiciosas".

Kingston se quedó sin palabras. ¿Cómo podría haber una madre así en este mundo? Sin embargo, después de pensarlo detenidamente, existían madres como estas.

"Tengo muy baja autoestima. Siempre me han despreciado desde la infancia. Sentía que estaba viviendo como una payasa. No quería ir a la escuela en absoluto y no quería estudiar. Mi madre tampoco consideró que me iba bien académicamente. Por lo tanto, dejé la escuela después de graduarme de secundaria".

Kingston miró a Eevonne con incredulidad. "Abandonaste la escuela cuando eras muy joven. Entonces, ¿en qué… en qué trabajaste cuando eras tan joven?".

Eevonne de repente sonrió. "Nunca podrías imaginar qué tipo de trabajos he hecho después de eso".