Castigado por su amor romance Capítulo 2793

Ella fue verdaderamente sincera.

Cuando Kingston y Eevonne se dirigían acá desde su nueva casa, Kingston no dejaba de decirle: "Mi prima no ha estado en casa durante algunos años. Tenemos que aceptarla sin problemas. Tenemos que hacerle saber lo importante que es ella para la familia y hacer que se sienta necesitada. Tenemos que hacerle saber que a pesar de que se ha ido durante casi cinco años y ha estado deambulando por aquí todos estos años, sigue siendo la experta en el círculo de moda de Ciudad del Sur".

Después de decir tanto, Kingston miró a Eevonne a modo de disculpa. "Querida, no te enojes. Mi prima no ha estado en casa durante algunos años, después de todo…".

Eevonne presionó su cabeza contra la cabeza de Kingston. "¡Tonto! ¿Por qué crees que me gustas? Es porque vi cómo fuiste persistente y fuiste por todos lados buscando a tu prima. Nunca te rendiste. Es porque vi ese profundo sentido de parentesco que tienes con tu prima que tú me gustas. Tu prima ha vuelto ahora. Si ya no la amas tanto, ¡no estaría de acuerdo contigo! ¡No te preocupes! Tu esposa comparte el mismo nombre que tu prima. Ciertamente la trataré como si fuera mi propia hermana menor".

"Querida, pareces ser más joven que mi prima", se burló Kingston de ella.

"¡Al diablo contigo! ¡Te ignoraré y solo hablaré con tu prima!". Eevonne pellizcó la nariz de Kingston.

Después de eso, ambos se miraron y sonrieron. Así, la pareja llegó a un acuerdo de que cuando llegaran a la casa de Yvonne, Yvonne sería la prioridad de todo lo que dijeran o hicieran. De hecho, Eevonne sintió pena por Yvonne desde el fondo de su corazón. Ambas eran personas que habían experimentado dificultades, por lo tanto ella simpatizaba con Yvonne. Sin embargo, lo que tomó a Eevonne por sorpresa fue que después que Yvonne la miró de arriba a abajo, inmediatamente dijo: "¡No importa cómo te vistas, no podrás quitarte esa aura de campesina!".

Eevonne se quedó sin palabras en un instante, se sintió tan avergonzada. Justo en ese momento, Sabrina y Minerva tocaron la puerta y entraron, así que terminaron con la incomodidad momentánea. Al ver que entró Sabrina, Yvonne se volvió extremadamente amigable.

Ella liberó ambas manos que estaban sujetas y corrió hacia Sabrina. "Señorita Sabrina, ¿dónde has estado todo el día? Ni siquiera has venido a visitarme. Te extrañé muchísimo…".

Sabrina se quedó sin palabras. Estaba realmente molesta de que Yvonne se dirigiera a ella como Señorita Sabrina. Esa manera halagadora y esa cursilería. ¡Ella realmente no podía soportarlo!

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