Castigado por su amor romance Capítulo 347

Después de que Linda se fuera, Sabrina continuó con su trabajo y empezó a organizar los nuevos documentos que le habían entregado.

Decidió que podría seguir trabajando aquí mientras nadie le causara más problemas.

Hasta ahora, su primer día en la empresa había sido una combinación de emoción y frustración. Sabrina había asumido inicialmente que se le pediría que hiciera horas extras para terminar de organizar los documentos, y se sorprendió cuando Linda le dijo que recogiera sus cosas cuando terminara el horario de oficina.

“Aquí no hacemos horas extras. Puedes terminar el trabajo mañana. No te agotes o te verás vieja y descuidada. Cuando eso ocurra, ya no podrás ser una amante. Demos por terminado el día”.

Aunque Linda había utilizado un tono sarcástico, a Sabrina no le molestó en lo más mínimo.

Recogió su bolso y se fue junto con el resto de sus compañeras. Mientras salía, vio a Yvonne esperándola junto al mostrador de servicio.

“¡Sabrina!” Yvonne le gritó emocionada.

“Acabo de terminar mi trabajo”, dijo Sabrina y le sonrió.

“¿Cómo estuvo?”, preguntó Yvonne.

“Bastante bien”.

Después de marcar su hora de salida, entraron juntas en el ascensor. Una vez que llegaron a la planta baja, Yvonne le susurró a Sabrina: “Déjame decirte algo, la gente de mi departamento estaba hablando de Ruth”.

Por lo visto, salió toda la tarde y no volvió a trabajar en absoluto. Siempre actúa con tanta arrogancia, así que es la primera vez que la vemos tan derrotada. Aunque fue refrescante verla en ese estado, debes tener cuidado con ella”.

Sabrina asintió con la cabeza y aceptó su consejo. “De acuerdo, gracias”.

“¿De verdad conoces al primo político de Mindy... Nigel?”. Yvonne tenía curiosidad.

“¿Qué te dijo tu primo?”. Dada la personalidad entrometida de Yvonne, Sabrina supuso que probablemente ya le había preguntado a su primo.

“¿Cómo sabías que ya le había preguntado a mi primo? Eres muy inteligente”. Yvonne se rio. “Mi primo no dijo mucho. Solo me dijo que te cuidara y que le informara si te pasaba algo en el trabajo”.

“¿Eres la novia de mi primo?”.

Sabrina se mordió el labio y decidió no preguntar nada más.

“¿Cómo fue tu primer día de trabajo?”, preguntó Sebastian con indiferencia.

“Bastante bien”. Para Sabrina, cualquier trabajo que le permitiera ganarse la vida con sus propias manos ya era perfecto.

“¿No ha pasado nada?”, preguntó Sebastian.

Al oír su pregunta, Sabrina mantuvo la boca cerrada.

Él obtuvo su información rápidamente. A pesar de que acababa de terminar su primer día de trabajo, Sebastian definitivamente conocía cada pequeño detalle de cómo le fue.

Después de unos segundos, ella preguntó con cuidado: “¿No lo sabes ya?”.

“Quiero que me lo digas con tus propias palabras. ¿Qué está pasando entre tú y Ryan?”, le preguntó Sebastian con calma.