Castigado por su amor romance Capítulo 358

Cuando escuchó la voz de Ruth, Sabrina trató de ignorarla y se dirigió directamente al ascensor dentro del vestíbulo.

No iba a empezar a tomar represalias inmediatamente solo porque Sebastian le había dicho que no tolerara a la gente que intentaba intimidarla. Por su naturaleza, Sabrina no era una persona conflictiva en absoluto. Además, ya que estaba en la empresa, no quería perder el tiempo con Ruth, alguien que solo consiguió ser contratada por relaciones familiares y que no tenía inteligencia propia de la que hablar.

Sabrina presionó los botones de ambos elevadores al mismo tiempo.

Sin embargo, justo cuando se abrieron las puertas de uno de los ascensores, Ruth consiguió alcanzarla. “¡Sabrina! ¿Quién crees que eres? ¿Crees que eres mejor que todos los presentes solo porque el Amo Ryan te mostró algo de atención? ¡Déjame decirte que no eres mejor que cualquier otra mujer que él tenga en su poder!”.

Tan pronto como Ruth terminó de hablar, Sabrina entró en el ascensor.

Ella inmediatamente la siguió.

Cuando Sabrina vio esto, resopló despectivamente antes de salir del ascensor. Luego se dirigió rápidamente al otro ascensor. Antes de que Ruth pudiera reaccionar a tiempo, Sabrina ya había cerrado las puertas del ascensor.

“¡P*rra! Cómo te atreves a engañarme”. Mientras Ruth trataba de alcanzar a Sabrina, accidentalmente se le atascaron los tacones en el espacio entre el ascensor y el suelo.

“¡Oh!”, exclamó.

Ruth perdió el equilibrio y accidentalmente se torció el tobillo. Además, su falda también se desgarró.

Por un breve momento, su entrepierna quedó al descubierto, lo que provocó una escena muy incómoda.

Afortunadamente para ella, todavía no era una hora concurrida, así que solo había unas pocas personas en el vestíbulo que habían visto a Ruth así. Sin embargo, debido a su habitual actitud dominante y arrogante en la oficina, no se atrevieron a mirarla por mucho tiempo.

No obstante, Ruth se sintió furiosa por haber sido humillada de esa manera.

Cuando llegó el siguiente ascensor, entró en él y se dirigió al piso de su departamento, subió las escaleras y volvió a su escritorio antes de sacar un traje de repuesto de su gaveta. Después de ponérselo, cojeó enojada hasta el departamento de diseño donde trabajaba Sabrina.

Mientras tanto, Sabrina había estado esperando a que Linda le asignara la carga de trabajo del día. Por orden del director de diseño, Linda debía guiarla durante una semana.

Sin embargo, ella no quería asumir esa tarea.