Castigado por su amor romance Capítulo 432

Mindy se burló para sus adentros al otro lado de la línea y luego continuó diciendo: “Selene, desde un principio no quería contarte sobre este asunto, pero esa mujer, Sabrina, vino a descargar su ira después de soportar las molestias y torturas de tu prometido, el Amo Sebastian”.

“Ella no solo coqueteó en secreto con mi prometido, sino también con mi primo, Marcus”.

“Te diré una información adicional. Me enteré de que se involucró con el pequeño y Joven Amo de la familia Poole de Ciudad Kidon, el Amo Ryan”.

“Fue una pena que no tuviera la oportunidad de quedarme con la familia Shaw, y no se me considerara una dama de las familias influyentes de Ciudad del Sur. Por lo tanto, solo pude ver cómo Sabrina, esa campesina y pésima mujer, utilizaba los trucos más baratos para seducir a todos los hombres de la alta sociedad. Solo pude ver cómo seducía a mi prometido y no tenía capacidad para hacer algo al respecto”.

En el otro extremo, Selene se burló con suficiencia: “¡Mindy Mann! Lo que dijiste era cierto. En efecto, no se te considera como una dama de ninguna familia influyente. La razón por la que mi abuelo te crió como su propia nieta durante tantos años fue porque perdió una hija, ¡que resultó ser mi madre!”.

“Fue porque mi abuelo extrañaba a mi madre, así que vertió todo ese amor paternal suyo en ti. Ahora que estoy de vuelta, por supuesto, ya no significas nada”.

“Sin embargo, yo, Selene Lynn, no soy una mujer sin corazón y desleal”.

“¡Tú no puedes contra Sabrina, pero yo sí!”.

Mindy se alegró en secreto al escuchar eso.

A Mindy también le desagradaba Selene. Podría decirse que odiaba a esta mujer presuntuosa. Sin embargo, Mindy no tenía otra opción porque Selene era la verdadera nieta del Abuelo Shaw.

A Mindy solo le quedaba halagar y adular a Selene y luego utilizarla para derrotar por completo a Sabrina.

Mindy era un poco más astuta que Selene. Sin mostrar sus verdaderos sentimientos, Mindy dijo mientras fingía no estar molesta: “Esa mujer, Sabrina, es realmente muy odiosa. Honestamente, Selene, le tengo bastante miedo”.

“¿Le tienes miedo? ¡Ja, ja!”. Selene dejó escapar una carcajada maníaca.

“Sí. ¿Cómo no tenerle miedo? Si no le tuviera miedo, no tomaría la iniciativa de decirte dónde trabaja. No tengo miedo de nada más; solo tengo miedo de que ahora sea la prisionera de Sebastian y esté vigilada por él todo el día”.

“Sin embargo, Sebastian no le da dinero para gastar. Por lo tanto, ella tiene que ganar su propio dinero para pagarle en su lugar. De esta manera, ya que sedujo a mi prometido, a mi primo y también al Amo Ryan, digamos que si estuviera embarazada de nuevo, ¿de quién sería el bebé?”.

“¡Vete al infierno!”.

Era obvio que Sabrina, por otra parte, no podía escuchar las cantidades de maldiciones que Mindy lanzó hacia ella.

En ese momento, Sabrina y Sebastian acababan de llegar a casa tras recoger a Aino.

Aino estuvo hablando con sus padres durante todo el viaje de regreso. Sabrina no le explicó deliberadamente a Sebastian por qué estaba sentada en un café con Nigel. Tampoco preguntó de qué habían hablado entre ellos después de que ella se fuera.

Cuando llegaron a casa, la familia de tres se bajó del coche, entraron al ascensor y se dirigieron al apartamento como de costumbre.

La Tía Lewis, que estaba en la casa, vio a la familia de tres regresando juntos, e inmediatamente dijo con una gran sonrisa: “El Señor, la Señora y la Pequeña Princesa han regresado. Deberían lavarse primero las manos y sentarse un momento en el comedor. La cena se servirá pronto”.

“Gracias, Tía Lewis”. Sabrina sonrió cortésmente y luego llevó a Aino al baño para lavarse las manos.